El hilo que une a la Italia de Giorgia Meloni, la nueva primera ministra ultraderechista del país transalpino, con los defensores de la retórica más polémica de Estados Unidos ha vuelto a visibilizarse estos días. Los protagonistas han sido el líder de la Liga y actual ministro de Infraestructuras, Matteo Salvini, y el nuevo propietario de Twitter y fundador de Tesla y Space X, Elon Musk. Ambos han mantenido un intercambio de mensajes y han anunciado su intención de reunirse en el futuro. 

El primer paso lo dio Salvini. Durante un congreso celebrado la semana pasada en Roma, el ultraderechista italiano dejó claro su aprecio por el magnate. Musk es "un genio innovador”, dijo. “Me gustaría que trabajase más con Italia y en Italia”, añadió el político transalpino en unas declaraciones que luego fueron retomadas por diversos medios en inglés.

Acto seguido, el jefe de la Liga manifestó interés por lograr que el multimillonario invierta en el maltrecho sector automovilístico italiano. “Sé que (Musk) ha tenido algunas dificultades para invertir en Alemania. Nuestras puertas están abiertas”, continuó Salvini. “Muy amable de su parte. Espero impaciente a que nos encontremos”, comentó finalmente este fin de semana el estadounidense en un tuit de respuesta a un artículo en Tesmanian, un blog especializado en noticias de Tesla. “Sería un placer y un honor”, le ha respondido Salvini, siempre desde la red social. 

La empresa que invirtió con Musk

Se trata de un acercamiento público singular, aunque también de consecuencias imprevisibles, sobre todo si se tiene en cuenta que Salvini es un convencido euroescéptico y uno de los grandes representantes en Europa del nacionalismo más agresivo, una especie de Donald Trump italiano, el expresidente estadounidense que precisamente Musk acaba de readmitir en Twitter después de que fuera suspendido de la red social por riesgo de incitación a la violencia tras el asalto al Capitolio del 6 de enero de 2021. 

Tanto es así que el propio Salvini festejó el anuncio sobre Trump. “(Musk) readmitió a Donald Trump en Twitter. Por haber liberado a la plataforma de los biempensantes y de la izquierda caviar… aplausos”, opinó el sábado el ultraderechista en un breve tuit. Unos comentarios que no cogieron por sorpresa a quienes siguen de cerca los vínculos de Salvini, que ya en el pasado recibió el respaldo de Trump por sus polémicas ideas antinmigración. Por el contrario, la incógnita es cómo se estará observando esto desde Bruselas, en momentos en los que la Comisión Europea ha subrayado que estará atenta para comprobar si Twitter respeta la legislación europea. 

Para más inri, el intercambio entre Musk y Salvini no se produce en un momento cualquiera. Llega días después de que Italia se haya convertido en uno de los pocos países europeos involucrados en la compra de Twitter por parte de Musk. Una maniobra realizada a través de la aseguradora Unipol. De hecho, esta última, una de las principales compañías de seguros del país transalpino, confirmó a comienzos de este mes haber invertido en la operación de Musk para adquirir Twitter. “Tuvimos la oportunidad de realizar una inversión y lo hicimos”, dijo el consejero delegado de Unipol, Carlo Cimbri.