Guerra en Ucrania

El Kremlin estudia ampliar su presencia militar en Bielorrusia y promete defenderla como si fuera su propio territorio

Ambos países cooperan en materia de Defensa y Minsk ha brindado apoyo a Moscú desde el inicio de la ofensiva en Ucrania

Vladimir Putin y Alexander Lukashenko.

Vladimir Putin y Alexander Lukashenko.

Àlex Bustos

Moscú pretende defender Bielorrusia como si fuera parte integrante de la Federación Rusa. Con el objetivo de hablar precisamente de esta idea, el ministro de Defensa ruso, Serguéi Shoigú, se desplazó recientemente a la capital bielorrusa para conversar, tanto con su homólogo, Viktor Khrenin, como con otros líderes del país, incluyendo el propio presidente, Aleksándr Lukashenko. "Necesitamos plenas garantías de seguridad de nuestra hermana Rusia", apuntó el mandatario durante unas recientes conversaciones con Vladímir Putin.

A pesar de que la presencia militar rusa en Bielorrusia es significativa, Moscú se plantea ampliarla. Así lo afirmó Shoigú durante la visita, quien recordó que se examinarán "todas las cuestiones relativas a su estancia (de los efectivos del Ejército), formación, y probablemente a la ampliación de su estructura". El responsable ruso quiso agradecer la predisposición de Minsk a la cooperación militar, expresando "un agradecimiento especial" a su Ministerio de Defensa y al mismo presidente bielorruso. El dirigente aprovechó la ocasión para informar de que las autoridades bielorrusas han proporcionado "cinco campos de tiro, equipados y acondicionados", además de "un número suficiente de instructores y oficiales de las Fuerzas Armadas bielorrusas" para el entrenamiento de los militares rusos presentes en suelo bielorruso.

Desde el inicio de la ofensiva rusa en Ucrania, se ha especulado con la posible entrada del Ejército bielorruso como fuerza beligerante. Por ahora, no ha participado de forma directa, aunque ha proporcionado apoyo a Moscú desde el inicio del conflicto. La ofensiva sobre Kiev y Chernóbil del principio de la ofensiva no hubiera sido posible sin el permiso de Bielorrusia para que las tropas rusas usaran su territorio. Este apoyo no le ha salido gratis a Minsk, cuyo país ha sido incluido en listas negras y ha sido objeto de sanciones que han perjudicado su economía.

Como si fueran el mismo país

Que ambos estados se unan para formar uno solo es algo que lleva rumoreándose prácticamente desde la disolución de la URSS, aunque nunca se ha llegado a concretar algo que realmente diera pie a pensar que eso fuera a suceder en un futuro próximo. Por poner un ejemplo de cuan cercanos se hallan estos países: viajar entre ellos es muy fácil para los ciudadanos rusos y bielorrusos, quienes únicamente deben presentar su pasaporte nacional, el equivalente al DNI español. Recientemente, a principios de marzo, las autoridades de ambos países acordaron que los extranjeros con visado o permiso de residencia de Bielorrusia puedan entrar en Rusia con ese mismo documento y viceversa, abriendo la puerta y extendiendo dicha facilidad para viajar entre los dos estados a cualquier extranjero que tenga permiso para permanecer legalmente en uno de los dos países.

A día de hoy, los dos estados son integrantes de la Unión de Rusia y Bielorrusia, que tiene como finalidad estrechar vínculos políticos y económicos, y que entre otros proyectos, tiene en mente crear una divisa única. Actualmente cada uno de ellos tiene el rublo, su propia versión diferenciada de la que también fue la moneda empleada en la URSS.