Rusia bombardea un hospital en Dnipro y causa al menos dos muertos

Rusia ha lanzado durante la noche del jueves al viernes un ataque masivo con drones kamikaze y misiles contra Dnipro, una localidad de casi un millón de habitantes a orillas del río homónimo, que hasta el momento había permanecido relativamente al abrigo de los bombardeos. Un buen número de los proyectiles e ingenios aéreos fueron neutralizados por las defensas antiaéreas ucranianas, aunque uno de ellos impactó en una clínica causando dos muertos y una treintena de heridos.

"Otro ataque ruso con misiles, otro crimen contra la Humanidad", escribió el presidente ucraniano Volodímir Zelenski en su cuenta de Twitter. El mandatario precisó que también resultaron dañadas una clínica psicológica y otra veterinaria. "Solamente un estado diabólico puede atacar hospitales; no puede haber ningún propósito militar en esto; es puro terror ruso", denunció el jefe del Estado ucraniano. De acuerdo con fuentes oficiales, los fallecidos son un hombre de edad avanzaba que pasaba por el lugar en el momento del impacto, y otro hombre cuyo cuerpo fue recuperado de entre los escombros.

Decenas de heridos

"Hay ya una treintena de heridos, entre los cuales dos niños; no tenemos ningún contacto con tres personas que podrían encontrarse allí (en el interior del edificio)", informó el gobernador local, Serhiy Lyssak. Los bombardeos nocturnos también afectaron a Kiev, la capital, aunque en esta ocasión se realizaron con misiles de crucero disparados por bombarderos estratégicos Tupolev Tu-95 posicionados sobre los cielos del mar Caspio. "Según las informaciones preeliminares, todos los objetivos sobre los cielos de Kiev han sido detectados y destruidos", informó la alcaldía capitalina. En total, de acuerdo con el Estado Mayor ucraniano, 55 ataques rusos han tenido lugar en las últimas horas contra objetivos en Ucrania, resultando afectada incluso una presa de la región de Donetsk, con un gran riesgo implícito de provocar una inundación. Una vez más, Moscú negó haber abierto fuego contra objetivos civiles, e insistió en que sus ataques tenían como objetivo "depósitos de municiones", proclamando de paso que "todos" los objetivos habían sido alcanzados.

Todo ello sucede mientras la región rusa de Bélgorod, fronteriza con Ucrania, se convertía a de lleno en un escenario bélico con todas las de la ley, al ser objeto permanente de bombardeos ucranianos, después de haber experimentado en los últimos días la primera incursión armada desde el país vecino protagonizada por voluntarios rusos proKremlin. La localidad de Kozinka, hasta donde llegaron los milicianos antikremlin desde el país vecino, sufrió decenas de disparos de artillería que provocaron principalmente daños materiales. En localidades situadas a decenas de kilómetros del linde fronterizo, como Bélgorod o incluso Krasnodar, aviones no pilotados han provocado daños materiales de consistencia. En la primera población, una bomba causó importantes desperfectos en un edificio administrativo, incluyendo la rotura de los vidrios en las ventanas.