El calendario oficial de Extremadura no incluye dos de las vacunas que los pediatras recomiendan poner a los pequeños: la que combate el rotavirus (la infección que causa la gastroenteritis, una de las principales causas de ingreso hospitalario entre los lactantes) y la de la meningitis B. Ambas se adquieren en las farmacias con receta médica y se suministran generalmente en los centros de salud, al igual que el resto de vacunas incluidas en el calendario.
Al margen de la libertad ideológica para decidir si inmunizan a sus hijos o no, el principal inconveniente con el que se encuentran los padres que sí deciden hacerlo es el precio, ya que son tratamientos caros. En el caso del rotavirus (la vacuna se comercializa bajo los nombres de Rotateq y Rotarix) 210 euros, pues son necesarias tres dosis a los dos, cuatro y seis meses de edad y cada una de ellas ronda los 70 euros.
Dosis disponibles
Para la inmunización contra la meningitis B (la polémica vacuna Bexero) también se necesitan tres dosis a inyectar a partir de los tres meses, a un precio que ronda los 110 euros por unidad. Según confirma el Colegio de Farmacéuticos de Badajoz, el problema de abastecimiento que hace un par de años se dio con esta vacuna hoy está resuelto y puede adquirirse sin problemas en las farmacias.
El coordinador del Comité Asesor de Vacunas de la Asociación Española de Pediatría (AEP), Javier Moreno, explica que las tasas de cobertura para estas dos vacunas no financiadas rondan en la región el 50%, una cifra similar a la que registran el resto de autonomías.
Desde la AEP se defiende su inclusión en el calendario oficial de vacunaciones (también se recomienda incluir la vacuna meningocócica ACWY y la del papiloma humano para los varones adolescentes) y de hecho algunas autonomías sí las incluyen, pero en el caso de Extremadura la Consejería de Sanidad siempre ha defendido que cualquier cambio en este sentido debe estar tutelado por el ministerio y abordarse en el Consejo Interterritorial de Salud. El Ministerio de Sanidad, por su parte, insiste en que para incluir cualquier vacuna en el sistema debe estar ampliamente contrastada su seguridad y su eficacia.
En su conjunto, los dos tratamientos suponen a las familias un desembolso que ronda los 500 euros y por ello los pediatras incluso han planteado la posibilidad de crear subvenciones públicas que ayuden a las familias que lo deseen a afrontar este gasto. «Sería una medida a explorar, como ocurre con el resto de medicamentos recomendados por los médicos, donde hay parte de financiación pública y otra parte la paga el paciente», afirma Moreno.
Además del rotavirus y la meningitis B, que se recomiendan desde hace años, la Asociación Española de Pediatría incluye ya en su calendario la nueva vacuna tetravalente conjugada frente al meningococo de los serogrupos A, C, W e Y, que también está en el mercado, y la del Virus del Papiloma Humano (VPH) para los varones adolescentes, ya que en la sanidad púlbica solo se financia para las chicas.
