A finales de noviembre pasado, la asociación interprofesional Asici presentó la aplicación para móviles ‘Ibérico’. El objetivo con el que se lanzó esta ‘app’ es que los consumidores dispongan de una herramienta para conocer la trazabilidad de las piezas en el momento en el que van a comprarlas, ya sean jamones o paletas, y que tengan la seguridad de que están amparadas por la norma de calidad del ibérico. A día de hoy son ya «en torno a 19.000 las descargas» de esta aplicación que se llevan contabilizadas, destacan fuentes de Asici, que añaden que con ella «se han leído más de 150.000 precintos». Una actividad que se ha registrada no solo en España, sino en 38 países diferentes.

En la aplicación están volcados los datos de «todos los jamones y paletas que se han identificado con precinto desde la aplicación de la norma del 2014», remarca la interprofesional. Eso supone alrededor de «sesenta millones de piezas», cuya información está al alcance del consumidor para poder conocer con detalle la trazabilidad de cualquiera de ellas.

Todos estos datos proceden de Ítaca, un sistema digital que integra y transmite cuál ha sido el itinerario seguido por los derivados del cerdo ibérico, desde el nacimiento del lechón hasta la llegada del producto a las tiendas, pasando por los mataderos e industrias.

De esta forma, consultando esta aplicación es posible conocer el manejo y la alimentación recibidos por el animal —si es bellota, cebo de campo o cebo—, su porcentaje racial, la autonomía donde se elaboró la pieza o cuándo comenzó el proceso. Esto último permite saber si se ha cumplido con el periodo mínimo de curación exigido por la norma.

Los datos del sector

Durante el pasado año, en España se identificaron con precintos de la norma de calidad del ibérico alrededor de 6,5 millones de jamones y una cifra muy similar de paletas.

A lo largo de ese ejercicio, en los hogares españoles se consumieron algo más de 14.300 toneladas de jamones y paletas ibéricas, por un valor que superó los 411 millones euros, según datos del Ministerio de Agricultura.

En cuanto al consumo realizado fuera de las fronteras españolas, en la última década ha habido un crecimiento superior al 140% en las exportaciones de jamones y paletas curados, superando los 448 millones de euros en el 2018.