1...es una de las enfermedades más antiguas?

La gota es una de las enfermedades más antiguas conocidas. Los egipcios identificaron la enfermedad en 2640 a.C. y el antiguo médico griego Hipócrates la llamó «trampa del pie». Más recientemente, también fue considerada una «enfermedad aristocrática» que afecta solo a aquellos que podían permitirse comidas y bebidas de ricos.

2...no solo produce ataques en el dedo gordo del pie?

Aunque la primera articulación metatarsofalángica es la más frecuentemente afectada, la gota también puede inflamar el tarso (empeine) del pie o el tobillo, confundiendo al paciente y a médicos inexpertos haciéndoles pensar que se trata de un esguince (aunque no haya tenido traumatismos en ese tobillo). Puede inflamar otras articulaciones como la rodilla, el codo (sobre todo la bursa olecraniana, que «acolcha» la parte posterior del codo), la muñeca, etc.

3... con el ácido úrico, normal se puede llegar a pacederla?

Sí, esto puede ocurrir hasta en más del 50% de pacientes. Los niveles de ácido úrico en sangre en el momento del ataque de inflamación no siempre son representativos de la cantidad de cristales de urato depositados en las articulaciones. Hay pacientes con ataques evidentes de gota que tienen el ácido úrico normal, y también hay pacientes con cifras elevadas del mismo que sin embargo padecen pocos síntomas. Tener el ácido úrico normal en una analítica no excluye el diagnóstico de gota.

4... hiperuricemia y gota son conceptos diferentes?

Hiperuricemia significa tener elevado el ácido úrico en sangre, esto es, niveles superiores a 6’8 mg/dL, pues ese es su punto de cristalización. Se habla de de gota cuando existen depósitos de cristales de urato en los tejidos (articulaciones, riñones, etc.). Aunque solo una de cada diez personas con el ácido úrico alto sufrirá gota, ésta suele precederse y acompañarse de una hiperuricemia crónica. Tener el ácido úrico elevado en sangre de forma habitual refleja que somos incapaces de eliminarlo correctamente, que producimos más de lo normal o ambas cosas. Si esto se prolonga durante años puede dar lugar a los depósitos cristalinos, con síntomas diversos.

5...se produce por ciertas comidas y bebidas?

Aunque la alimentación es importante, la gota se produce en más del 90% de casos por un problema de eliminación del ácido úrico por el riñón. No es recomendable abusar de alimentos ricos en purinas: cerveza (con y sin alcohol), bebidas lcohólicas de alta graduación y bebidas edulcoradas (refrescos, etc.), vísceras, carne roja y carne de caza, marisco y pescado azul (sardinas, anchoas, etc.). El tomate puede facilitar ataques articulares en pacientes con gota, pero un consumo moderado del mismo no suele originar problemas. Es aconsejable beber 1-2 litros de agua al día (sobre todo si hay cálculos renales de urato) y resultan beneficiosos los lácteos desnatados, las cerezas, los alimentos ricos en vitamina C y el café (consumo moderado). Por otro lado, habrá que evitar y combatir el sobrepeso y la obesidad, intentando realizar actividad física varios días en semana.

6... no la curan los antiinflamatorios tradicionales?

Duele ocasionalmente. Produce una inflamación sistémica y no sólo articular, además de poder afectar a órganos vitales como el riñón. La hiperuricemia y la gota se relacionan además íntimamente con el síndrome metabólico, de forma que no es raro encontrar varios factores de riesgo tradicionales en los enfermos con gota, como obesidad, niveles altos de colesterol y triglicéridos, resistencia a la insulina, hipertensión arterial, etc. Todos estos factores se potencian entre sí, convirtiendo a estos enfermos en pacientes de riesgo cardiovascular moderado o incluso alto. Es por ello que ha de prestarse la misma atención y el mismo respeto a los niveles de ácido úrico en sangre que a los niveles de lípidos o de glucosa.

7... es mucho más que una articulación que se inflama?

Tanto la colchicina como los antiinflamatorios son medicaciones empleadas frecuentemente en los ataques agudos de inflamación articular para calmar el dolor y la hinchazón, pero estos solo consigue quitar los síntomas producidos por los cristales de urato sin eliminarlos. Para curar la gota se necesita disolver esos acúmulos cristalinos con la medicación oportuna que hemos referido antes, y esto se consigue gracias a un tratamiento bien realizado durante meses y años, según cada paciente. El depósito de cristales de ácido úrico solo se resolverá con constancia en la medicación, supervisada por un médico, y con unos hábitos de vida saludables.