Enfermeras del Centro Residencial El Prado de Mérida criticaron ayer la situación de «sobrecarga» de trabajo que soportan debido a la «escasez» de personal, con lo que se pone «en riesgo la seguridad» de los pacientes y de ellas mismas. En el centro viven en la actualidad un total de 219 residentes, de los cuales 100 son personas valoradas con grados II y III, es decir, que presentan dependencia severa y gran dependencia. Asimismo, el resto de los usuarios, debido a su edad avanzada y a sus múltiples patologías, precisan cuidados moderados diariamente, según informaron ayer estas profesionales a través de una nota de prensa.

De la misma manera, estas enfermeras indican que a todos los usuarios se les proporciona los cuidados propios de atención primaria, que son control de constantes, analíticas de sangre y orina, INR, curas, inyectables, aerosoles, electrocardiogramas o vacunaciones. En las plantas de asistidos, además de todo lo anterior, se realizan tratamientos hospitalarios de cuidados paliativos, mientras que diariamente se prepara medicación para 200 personas polimedicadas, además de realizar por protocolo valoraciones geriátricas.

TURNO DE NOCHE // Según informa este personal sanitario, la plantilla actual consta de 10 enfermeras más un refuerzo para algunos fines de semana y estas profesionales cubren tres turnos (mañana, tarde y noche) durante todo el año. De esta forma, en el turno de mañana, de lunes a viernes, con un ratio de tres enfermeros y tres médicos, se realizan labores propias de enfermería, además de intercolaboraciones con los facultativos y, en el turno de noche, las sanitarias aseguran que el centro dispone de una sola enfermera para los 219 residentes del centro.

En esta línea, estas profesionales apuntan que, durante las noches, los fines de semana y los días festivos, las enfermeras además de atender los requerimientos de los residentes y familiares, son las máximas responsables de actuar ante todas las incidencias y urgencias que surjan en el centro, siendo «interrumpidas en el quehacer diario en múltiples ocasiones, pudiendo causar errores y provocando gran estrés».