Los equipos de rescate han localizado sobre las 11 horas de este martes el cadáver de Pedro Guillermo Macías Rey, el militar de 39 años que el pasado sábado desapareció en las aguas del embalse de Proserpina, en Mérida, mientras disfrutaba de una jornada de baño con su familia. La Delegación del Gobierno en Extremadura ha confirmado el hallazgo del cuerpo en la cuarta jornada de búsqueda.

Según ha explicado el jefe del parque de bomberos de Mérida, Juan Carlos Bermejo, el cadáver ha aparecido en uno de los "puntos calientes" donde se buscaba, a 50 metros de la orilla, en línea recta frente a la estación de hidropedales, y a unos 8,5 metros de profundidad. En el punto donde se le vio por última vez. Sobre las 13.30 horas se ha producido el traslado del cadáver al Instituto de Medicina Legal de Badajoz para practicarle la autopsia y esclarecer las causas de la muerte. Media hora después, sobre las 14 horas, apenas quedaba rastro del dispositivo de búsqueda en el embalse.

Pedro Macías, vecino de Cáceres y cabo de la Brigada Extremadura XI, despareció el pasado sábado sobre las 17.15 horas en las aguas de Proserpina. Una de las hipótesis que se baraja es que el hombre sufriera algún problema físico, ya que se hundió rápidamente pese a su presumible formación como buceador. Las últimas informaciones, procedentes de fuentes cercanas a la familia, aseguran que el hombre se encontraba sacando fotografías desde el agua a sus familiares, que estaban montados en un hidropedal, cuando de pronto se sumergió y logró salir un instante a la superficie, pero volvió a hundirse y ya no salió. 

El embalse de Proserpina es muy seguro para el baño porque no hay corrientes excesivas, pocetas, ni remolinos. Pero la capa de lodo del fondo impide toda visibilidad ,lo que ha dificultado enormemente la labor de los equipos de rescate. Los trabajos se han centrado en "barrer a mano todo el fondo del embalse para palpar el cuerpo, o que los buceadores se chocaron con él», según ha explicado Bermejo. Ha sido un trabajo «costoso y agobiante»: se han trazado calles imaginarias en el fondo del pantano, delimitadas por una cuerda a la que se agarra una pareja de buceadores para peinar el fango, con mucho cuidado para no levantar el cieno y provocar que el agua se enturbiase aún más.

Más de una treintena de agentes han participado en el operativo de búsqueda, que se había reforzado en las última jornada con la presencia de tres buzos de la Unidad de Actividades Subacuáticas de la Guardia Civil procedentes de Madrid. En el dispositivo ha participado también un equipo GEAS de Extremadura con tres efectivos, a los que se suman Policía Nacional, Policía Científica y Judicial. También la Brigada Extremadura XI, a la pertenecía el fallecido, ha incorporado efectivos y medios materiales a la búsqueda. Cruz Roja por su parte ha desplazado a la zona tres embarcaciones, dos vehículos 4X4, un furgón de avituallamiento, socorristas y psicólogos que han prestado apoyo a la familia en estos duros momentos. A todo ello hay que sumar además los bomberos del parque de Mérida y la Asociación de Rescate Subacuático.