Los principales monumentos de Mérida y la fachada del ayuntamiento se iluminan este lunes, día 17 de enero, en color esmeralda por la enfermedad de Perthes. Se trata de una necrosis avascular en la cabeza del fémur causada por la falta de riego sanguíneo. Se presenta más en varones (por cada 4 niños, 1 niña), entre 3 y 12 años pero con una mayoría en torno a los 6-8 años.

El 17 de enero se celebra el día de concienciación de la enfermedad de Perthes y, por ello, en la noche de hoy lunes, la fachada del Ayuntamiento de Mérida, la muralla de la Alcazaba y el Puente Romano se iluminarán en color esmeralda a petición de Asfape (Asociación de Familias con Perthes) con el objetivo de visibilizar esta enfermedad para dar a conocer esta afección poco común.

El síntoma más común es la cojera y también rigidez en la cadera, restricción de movimiento y dolor de rodilla, muslo o ingle, explica en nota de prensa el Ayuntamiento de Mérida.

Además del aspecto físico, la enfermedad de Perthes conlleva una gran carga psicológica que afecta a la vida familiar y social, no solo del propio niño afectado, sino de toda su familia. Los niños con Perthes no deben correr, saltar o hacer deportes de impacto, actividades tan comunes en la infancia.

Externamente es una enfermedad que no se aprecia, a no ser una leve cojera, por eso es muy necesario que todo el entorno del niño, familia, amigos, compañeros de colegio, profesores, comprendan la afección y entiendan sus limitaciones.