El Ayuntamiento de Mérida ha solicitado a la Consejería de Educación y Empleo una nueva escuela profesional dual (antiguas escuelas taller) de electricidad y fontanería y excavaciones arqueológicas. El presupuesto estimado es de 1,02 millones de euros, «el mayor hasta la fecha» para actividades de este tipo, según explicó ayer el delegado de Recursos Humanos, Julio César Fuster. La escuela llevará por nombre Barraeca II y planteará nuevas certificaciones profesionales en los sectores mencionados. 

Fuster explicó que la elección de las escuelas de fontanería y electricidad obedece a los «signos evidentes de recuperación» del sector de la construcción, con un crecimiento de la obra nueva en torno al 22,6% y de rehabilitación en un 30%. Los futuros alumnos de fontanería obtendrán un certificado que les posibilitará para trabajar en empresas privadas e incluso como autónomos. En electricidad, se podrán emplear también en parques fotovoltaicos. 

Excavaciones arqueológicas

Con respecto la especialidad de operario especializado en construcción, patrimonio y excavaciones arqueológicas, se pretende cubrir, por un lado, la demanda local de un sector con «dinámica continuada en Mérida», que por su riqueza patrimonial exige continuamente labores de control, prospección e intervención arqueológica en diferentes actuaciones de obra civil, así como en las labores imprescindibles de mantenimiento, conservación y reparación de los monumentos. 

«Ya tenemos compromisos de inserción de un 40% de los alumnos de cada una de las tres especialidades, es decir seis alumnos por cada especialidad», aseguró Fuster. Además, la Escuela Profesional Barraeca II potenciará una serie de intervenciones en la Huerta de Otero y el albergue juvenil El Prado. Podría contar con un presupuesto estimado de 1,02 millones de euros, el mayor presupuesto de escuelas profesionales hasta la fecha solicitado y 14.861 euros más que la edición de este año.