El alcalde de Mérida, Antonio Rodríguez Osuna, firmó ayer un decreto para ampliar temporalmente el horario de cierre de los establecimientos de hostelería y sus terrazas, que entró en vigor ayer y se extenderá hasta el 30 de septiembre. Una medida de «reactivación económica» que se adopta de acuerdo con la 'Ordenanza reguladora de los usos, instalaciones y ocupaciones en la vía pública de la Ciudad de Mérida', coincidiendo con la época de mayor afluencia de visitantes.
Según informó el consistorio emeritense en una nota de prensa, los meses de verano son una «buena ocasión» para que los establecimientos hosteleros sean «más demandados, como lugar de esparcimiento en las horas de menos calor», principalmente los fines de semana coincidiendo con la celebración del Festival Internacional de Teatro Clásico, La Semana del Orgullo, la Feria de Septiembre y el Stone&Music Festival.
Osuna indicó que estos eventos «atraen muchos turistas y conllevan que más personas disfruten de la ciudad y además los emeritenses hacen uso de los servicios de hostelería fuera de las horas centrales del día para evitar el calor». Así, se permitirá a cafés, bares, cafeterías y restaurantes que cierren a las 2 horas los días de diario y a las 2.30 horas los viernes, sábados y vísperas de festivos.
Por otro lado, los bares especiales, licencia F, que deben cerrar a las 3 horas, podrán hacerlo a las 3.30 horas, pero los veladores deben estar retirados a las 3 horas. Por su parte, discotecas, salas de baile, cafés-teatro, cafés-concierto, salas de fiestas con espectáculos, tablaos-flamencos, con licencia E, pueden cerrar a las 5 horas, a las que podrán sumar media hora los viernes, sábados y vísperas de festivos, pero los veladores deben estar recogidos a las 3 horas.
El ayuntamiento aclaró, no obstante, que esta ampliación de los horarios será revisable «total o parcialmente si se produjeran niveles sonoros por encima de los permitidos legalmente».