«Jamás el SES y el Sepad han estado tan coordinados» para dar respuesta a las necesidades del centro sociosanitario de Mérida. Lo dijo ayer en el pleno de la Asamblea el consejero de Sanidad, José María Vergeles, que tras la denuncia de los propios profesionales asegura que el centro solo ha estado «una semana» sin psiquiatra porque los dos que tiene asignados en plantilla estaban de baja. Durante ese tiempo, dijo, los pacientes tuvieron que ser atendidos en urgencias y de forma telemática, pero «la situación ya se ha normalizado hace varias semanas».
Vergeles se expresó así en respuesta a la diputada de Ciudadanos Encarnación Martín Andrade, que acusó al consejero de «llamar mentirosos» a los trabajadores del centro y los familiares de los enfermos. Andrade recordó que en el sociosanitario conviven 200 pacientes con patologías graves de «alteraciones de conducta, juicio y realidad», y que «es inhumana» la atención que han recibido.
«Los trabajadores se sienten abandonados, ignorados y lo peor, han visto vulnerados sus derechos por la propia consejería», aseguró Andrade para después recordar la «brutal agresión», según UGT, de un paciente a una limpiadora. En respuesta, Vergeles aseguró que la diputada se basa en «lo que dice la gente» y reiteró que «falta a la verdad».
