El alcalde de Mérida, Antonio Rodríguez Osuna, confió ayer en que las obras de desdoblamiento de la avenida Felipe VI, antigua N-630 hacia Cáceres, puedan licitarse antes de que finalice el año, por lo que la ejecución podría estar en marcha en marzo o abril del próximo año. En respuesta a una pregunta sobre este asunto en una rueda de prensa, indicó que la Junta de Gobierno Local ya ha realizado las cesiones correspondientes para la ejecución del estas actuaciones, tal y como avanzara este diario

Según la información que ha recibido recientemente de la Dirección General de Carreteras, el primer edil señaló que se espera que «antes de final de año se pueda licitar la obra». Si finalmente este plazo se cumpliera, en marzo o abril podría estar «por fin» en marcha esta obra que la ciudad lleva «tantos años esperando» y  que, como ya ha ocurrido con otros proyectos en los últimos años, ha sido "este gobierno el que saca adelante y desatasca problemas y males endémico de esta ciudad".