Tras seis años de espera, la reanudación de las obras de ampliación del Museo Nacional de Arte Romano de Mérida (MNAR) está cada vez más de cerca de llevarse a término. El Ministerio de Cultura y Deportes ha adjudicado el contrato para acometer este proyecto a la unión temporal de empresas (UTE) conformada por la Constructora San José y Grupo Empresarial Magenta, por un importe de 7.612.608 euros, con los impuestos incluidos. Según lo recogido en la plataforma de contratación estatal, la adjudicataria reduce el tipo de licitación un 8,8%, al ofrecer 741.879 euros menos de los 8,3 millones presupuestados por el departamento ministerial.
Una vez formalizado el contrato y firmada el acta de replanteo, la UTE tendrá un plazo de 24 meses para ejecutar los trabajos. Como ya avanzara este diario, 15 empresas habían presentado ofertas para acometer la obra, de las que cuatro quedaron excluidas por no haber conseguido la puntuación mínima que se exigía: Asch Infraestructuras y Servicios, Joca y las UTE Majoin-Jarquil Construcción y Araplasa-Gestión y Ejecución de Obra Civil. Las 11 que siguieron adelante en el proceso, no incurrían en valores «anormalmente bajos», después de que el ministro de ramo, Miquel Iceta, trasladara su preocupación por que el alza del precio de los materiales de construcción se tradujera en un nuevo retraso.
Cabe recordar que el Gobierno central encargó este proyecto al arquitecto Rafael Moneo en 2006 con el objetivo de incrementar la superficie del museo en más de 4.300 metros cuadrados. La constructora Sando se hizo con estos trabajos por 4,1 millones, pero los «importantes» hallazgos arqueológicos que salieron a la luz en 2016 los paralizó. Ahora, los restos deberán quedar integrados en el edificio de ampliación, que albergará la sala de exposiciones temporales, el aula didáctica, un auditorio, los talleres de restauración, de fotografía y nuevos despachos para conservadores.
