TAMBIÉN HABRÁ QUE ACUMENTAR EL PRESUPUESTO

Los restos arqueológicos paran la obra de las Concepcionistas en Mérida

Hay que modificar el proyecto inicial y hacer un "sondeo técnico" para reubicar los pilotes que sujetarán la pérgola que cubrirá la nueva plaza. Yáñez afirma que los trabajos se podrán retomar "en unas semanas"

Los restos arqueológicos hallados en el solar de las Concepcionistas de Mérida han obligado a paralizar «unas semanas» las obras para la construcción de la nueva plaza proyectada en el centro de la capital autonómica. Según explica la portavoz municipal, Carmen Yáñez, es necesario acometer una modificación del proyecto inicial para reubicar los pilotes (las columnas que dan soporte a la nueva pérgola que cubrirá este espacio) porque donde iban colocados inicialmente han aparecido restos arqueológicos que hay que proteger. Así, será necesario hacer un nuevo «sondeo técnico» para estudiar el subsuelo y determinar la nueva ubicación. 

La delegada asegura que pese a lo complejo del trámite no se demorará más de «unas semanas», pues el arquitecto que ha diseñado el proyecto, José María Sánchez, ya está trabajando sobre el modificado. Una vez esté listo, se remitirá a la Junta Local de Gobierno para su visto bueno y se podrán retomar las obras, adjudicados por 2,2 millones de euros a Díaz Cubero y Al Senera. El cambio también tendrá impacto en el presupuesto, aunque según Yáñez «dentro de los márgenes legales» para no tener que anular el contrato y sacar una nueva licitación.

Desde febrero

Los trabajos se paralizaron a comienzos de febrero por decisión del consistorio: la empresa podía seguir trabajando en cuestiones menores hasta que se modifique el proyecto y se realice el nuevo sondeo. «Pero en aras a sus intereses no nos parecía que siguiera si no puede ser al cien por cien», afirma Yáñez.

La portavoz aclara la situación en la que se encuentra la obra, uno de los proyectos estrella de la legislatura, después de que Unidas por Mérida denunciara ayer en un comunicado que los trabajos estaban paralizados. Según la formación, desde que la borrasca Efraín derribara una cubierta de nueva construcción, un extremo que Yáñez niega.

Unidas duda que la lluvia fuera la causante real de ese derribo, "teniendo en cuenta que se trata de un edificio de 300 años" y que la cantidad de precipitaciones caídas ese día no fue tan importante, y pone el foco en las actuaciones de la empresa. La formación exigió al consistorio que pida explicaciones, y volvió a subrayar «la falta de transparencia y la escasísima información» que rodea a este proyecto.

El ayuntamiento adquirió el solar (3.000 metros cuadrados) a la congregación por 900.000 euros en el verano de 2019 y posteriormente convocó un concurso de ideas para transformar esta parte de la ciudad. Ganó el proyecto Impluvium de José María Sánchez, que contempla la creación de una gran plaza pública en toda la manzana con un espacio verde en el centro.

Para ejecutar el proyecto se han derribado todas las dependencias que no tenían valor histórico para liberar el acceso a lo que hoy es el centro del convento. Esto incluía la peluquería de Willy, otro local comercial colindante cerrado y las viviendas que ocupaban las monjas. Se han conservado solo la iglesia gótica, el campanario, una pintura de la Virgen de Guadalupe y parte de las portadas en las esquinas con el Rincón de los Poetas y la calle Beatriz de Silva. El objetivo inicial es que esta nueva plaza estuviera terminada a finales de 2022 o en todo caso antes de que acabara la legislatura, sin que a día de hoy se haya ofrecido otra previsión.

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