El mausoleo de la casa del anfiteatro de Mérida estrena cubierta y mejoras para las visitas

El patrimonio arqueológico emeritense sigue incorporando mejoras. En este caso, el mausoleo de la Casa del Anfiteatro de Mérida estrena cubierta y panelería informativa, que harán más agradable la visita turística. Una empresa especializada en el campo patrimonial ha llevado a cabo estos trabajos, por un importe de 40.000 euros, con cargo a la subvención nominativa que recibe anualmente el Consorcio de la Ciudad Monumental por parte del Ministerio de Cultura y Deportes. 

La consejera de Cultura, Nuria Flores, ha manifestado este miércoles durante una visita al mausoleo que esta intervención supone "dar un paso más en la recuperación del patrimonio" de la ciudad. El director del organismo monumental, Félix Palma, ha explicado que el recinto seguía manteniendo la cubierta que se colocó de manera «provisional» cuando se excavó en 1994, por lo que era necesario instalar una nueva para proteger mejor los restos.

En el mausoleo de Cayo Julio Succesianus, del siglo II pero modificado durante la centuria siguiente, se han instalado paneles informativos para mejorar la calidad de las visitas. En este monumento funerario apareció el conocido como Dintel de los Ríos, que incluye una representación humanizada de los dos ríos que flanquean la ciudad: el Anas (Guadiana) y el Barraecca (Albarregas). Está dedicado a Gaius Iulius Successianus por su liberto Exsuperanti. "Es una de las piezas arqueológicas más significativas que se han descubierto en Mérida en los últimos años", ha destacado Palma.

Excavaciones en el peristilo

Por otra parte, cabe indicar que ya ha comenzado la excavación arqueológica en el peristilo del teatro romano, ya que la zona que está próxima al acceso lateral del recinto, que da a la calle Sáenz de Buruaga, aún no se ha excavado. Las últimas excavaciones que se realizaron de forma "sistemática" en este espacio, se realizaron entre los años 30 y 40 del siglo pasado, y desde esa fecha solamente se han realizado trabajos puntuales.

Para acometer el proyecto, el consorcio ha contratado a 15 peones de arqueología durante un periodo de seis meses, que a su vez ayudarán a «aligerar la lista de espera» de excavaciones en la ciudad. Además, el organismo monumental ha convocado pruebas selectivas para constituir listas de espera en la categoría de arqueólogos ante la «necesidad y urgencia» de contratar personal para trabajar en el yacimiento emeritense. 

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