El presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, ha defendido este miércoles que no cree que el alcalde de Mérida, Antonio Rodríguez Osuna, "a lo largo de su vida nunca haya sido sectario en sus comportamientos", y ha calificado los audios que se han filtrado como "un chantaje en toda su expresión".

"Cuando un audio se graba, se manipula, y se filtra para hacer un chantaje a un alcalde, no se puede dar carta de naturaleza al chantaje", ha defendido el también secretario general del PSOE de Extremadura a preguntas de los periodistas sobre la polémica generada en torno a los audios de Rodríguez Osuna en una conversación con un extrabajador municipal.

Ante esta situación, Vara ha rechazado "poner en valor lo que significa puro y duro un chantaje en toda su extensión", tras lo que ha explicado Osuna "en Mérida es conocido, lo conoce la gente que lo vota y los que no lo votan, los que son de un sitio, los que son de otro y los que no son de ningún lado". En ese sentido, ha asegurado que "todo el mundo lo respeta, y casi todo el mundo lo quiere, porque no creo que él a lo largo de su vida nunca haya sido sectario en sus comportamientos".

Así, ha añadido que "evidentemente el PP aquí en Mérida tiene un problema, lo sabe todo el mundo, y quiere que el problema se lo arregle Antonio o se lo arregle yo", tras lo que ha concluido asegurando que "lo van a tener que arreglar ellos, porque nosotros no se lo vamos a arreglar".

La presidenta del PP de Extremadura, María Guardiola, ha afirmado que Vara "defiende lo indefendible" con Osuna y le ha pedido que le retire de la vida pública. Para la dirigente popular, que ha insistido en que se admita la comisión de investigación solicitada por su partido en el ayuntamiento, se trata de un tema "de gravedad" sobre el que Vara se ha pronunciado seis días después "para no decir nada o lo que es peor para defender lo indefendible".

Críticas del PP local

Por su parte, la portavoz del grupo municipal popular, Pilar Nogales, ha criticado este miércoles que Osuna "intenta evitar dar explicaciones" sobre los audios en el pleno municipal que se celebra este jueves, "al convocarlo como extraordinario". El alcalde "impide la actividad de control de los grupos de la oposición a través de ruegos y preguntas", lo que supone que "no respeta el Reglamento Orgánico del pleno ni la legislación básica de régimen local, que obliga a convocar, al menos, un pleno ordinario al mes".

Según señala el PP de Mérida en nota de prensa, con esta convocatoria del pleno como sesión extraordinaria "tampoco estaría respetando el acuerdo al que se llegó a principio de legislatura de que dicho pleno ordinario se debe celebrar el último jueves de cada mes", señala. Considera que al convocarlo como extraordinario, "la pretensión del alcalde es que no haya actividad de control y fiscalización al equipo de gobierno y, por tanto, los grupos de la oposición no podrán realizar ruegos ni preguntas", lamenta.

El alcalde ha replicado al PP que los partidos políticos "se pueden expresar" sin necesidad de celebrarse un pleno, al tiempo que ha aclarado que las instituciones "no se pueden manejar al antojo de la voluntad de los partidos políticos". Osuna ha insistido en que el pleno que se celebrará este jueves, 30 de marzo, será extraordinario ya que se hablará "exclusivamente" de los remanentes positivos de tesorería.