El Arroyano, la empresa familiar que Lucio Salado fundó en Arroyo de la Luz en 1920, ya puede decir bien alto que elabora el mejor jamón ibérico del mundo. Ayer logró hacerse con el 'Jamón de Oro' del XXIII Salón del Jamón Ibérico, el máximo reconocimiento del sector del ibérico nacional. La satisfacción en Vidal Julio Ramos, consejero delegado de la empresa era enorme. Desde hace veintitrés años acude al Salón del Jamón, certamen que apoya desde sus inicios en el parque de Santa Lucía. La jornada de fue especialmente emocionante para la firma. Su hijo, Vidal Ramos, recogió el 'Jamón de Oro' que la alcaldesa de Jerez le entregó.

No llega este reconocimiento por casualidad. Ya en diciembre del año pasado El Arroyano ganó la Espiga de Plata de Caja Rural de Extremadura por un jamón de características similares. Vidal Julio Ramos explica que todos los elementos para lograr este premio se han forjado en Arroyo de la Luz, municipio donde se encuentra la fábrica. El cochino se crió en esta localidad cacereña gracias al trabajo del ganadero José Antonio Lucas durante una gran añada de bellotas y la pieza se curó durante casi cinco años en las instalaciones de El Arroyano. Se trata, además, de un jamón acogido a la Denominación de Origen Dehesa de Extremadura. El galardón de ayer es, sin duda, una justa recompensa al esfuerzo constante y sin descanso que toda la familia de El Arroyano ha realizado en aras de la mejora de la excelencia y la innovación en el sector.

El Jamón de Plata recayó también en todo un clásico del Salón del Jamón Ibérico, Embutidos Morato, otra empresa familiar, en este caso de Los Santos de Maimona, fundada en 1898. Es una de las empresas del ibérico más galardonadas de la región y cuenta con tres Espigas de Oro y un primer premio en el Salón del Jamón de Jerez de los Caballeros, logrado en su decimoquinta edición. Recientemente han apostado por la diversificación y producen una paleta semideshuesada y envasada al vacío, aprovechada al máximo. Disponen de una gran gama de embutidos y cremas de jamón, lomo, chorizo y salchichón, así como patés.

Finalmente, el Jamón de Bronce fue para la empresa local Jamones y Embutidos Neila.