El 40% de los ríos extremeños tienen su cauce contaminado”. “Bruselas pide al TUE una multa de 46.5 millones para España por malas aguas residuales”. Estas noticias y comunicados de prensa son recientes y desgraciadamente habituales en nuestro país, Todo esto a pesar de los esfuerzos realizados por las administraciones públicas, como el Gobierno de Extremadura- que destina dinero público para la depuración, pero sin obtener el resultado perseguido y deseable… Uno de los principales motivos de esta ineficiencia reside en que a pesar de la construcción de las depuradoras y de la explotación de éstas, dependiendo del tipo de vertido que llegue en las aguas residuales y otros factores, en los Decantadores convencionales se produce el fenómeno ‘Bulking y Foaming’ fangos flotantes, llenos de grasas, bacterias filamentosas y otros contaminantes, que los decantadores convencionales no son capaces de evacuar, puesto que estos flotantes pesan tan poco que se mantienen en la superficie de las aguas girando y girando (foto 1).

La única forma de deshacerse de estos flotantes tan perjudiciales, es extraerlos a través de ‘camiones chupona’ para su especial tratamiento siendo este un procedimiento muy costoso, por lo que en muchas ocasiones se toman medidas drásticas y no apropiadas. De modo que, estos residuos tan contaminantes se eliminan de formas tan poco ortodoxas como permitiendo su salida directa al rio, en días de lluvia, aprovechando que los análisis de las muestras recogidas esos días no son determinantes a efectos de sanciones. Incluso se dan casos en los que se desmontan temporalmente algunas de las chapas deflectoras (foto 2) para que estos residuos se vayan eliminando paulatinamente siendo vertidos directamente al río. Éstas prácticas provocan que los residuos queden depositados entre la flora de las orillas, dañando el hábitat de peces, aves, y otros animales, incluso intoxicando a los que se acercan a beber, acarreando tremendas consecuencias. Los técnicos de las administraciones públicas reconocen, que a pesar de que el sistema BDS es muy eficiente y barato a corto plazo, no es sencillo implantarlo en las depuradoras debido a que al ser un sistema novedoso no suele incluirse en los proyectos. Y admiten que en estos tiempos de crisis, se han llegado a rehacer proyectos a la baja para reducir costes, por lo que no parece el momento de implementar un nuevo equipo, aun sabiendo que es beneficioso para el medio ambiente.

INVESTIGACIÓN. Acuinge, concienciado con el medio ambiente, ha invertido en I+D para desarrollar un decantador, con sistema BDS, que soluciona los problemas de los decantadores convencionales. El BDS es el único sistema 100% eficaz y mucho más económico que las alternativas existentes para solucionar estos problemas. Acuinge ya ha comenzado a instalar estos equipos en distintas Comunidades Autónomas, como en Asturias, donde ya cuentan con el sistema BDS en dos decantadores de la Depuradora de Oviedo, y ésta ha solicitado financiación para instalarlos en otros cuatro decantadores más.

Así mismo, en Castilla y León se encuentra en funcionamiento en Olmedo y nos acaban de solicitar la instalación de otro BDS en la depuradora de Cabezón de Pisuerga (Valladolid). Sin embargo en Extremadura aún no nos han solicitado ninguno, como dice el refrán nadie es profeta en su tierra.

Desde Acuinge se espera que estos equipos de innovación y fabricación extremeña sean instalados poco a poco en todas las depuradoras y sobre todo en las de nuestra tierra, para además de evitar sanciones, que nuestros ríos tengan aguas puras y cristalinas, y que sean ríos llenos de vida.