hay gestos cotidianos que por ser básicos en nuestro día a día, no reparamos en su importancia. El simple hecho de abrir el grifo, de usar el inodoro o de depositar desechos en los contenedores de basura pone en marcha una compleja maquinaria de personas y de equipos técnicos que trabajan en silencio para que nos nos falte esa base fundamental de nuestras vidas. Y parece que solo reparamos en esa necesidad, cuando no disponemos de esos servicios.

En la provincia de Badajoz, gran parte de ese silencio lo aporta Promedio. El Consorcio formado por la Diputación provincial y la mayor parte de los municipios del territorio contribuye a gestionar en conjunto y de una manera eficaz, solidaria y sostenible servicios tan básicos como el suministro de agua potable, la depuración de aguas residuales o la recogida de residuos urbanos.

En el caso de los residuos, Promedio saca a la calle diariamente más de 70 camiones recolectores y unos 130 trabajadores que hacen ‘desaparecer’ los residuos que cada uno generamos en nuestras actividades diarias. Y no es un trabajo fácil. Durante el año 2018, la basura domiciliaria generada en los 94 municipios gestionados por Promedio se cifró en 73.100 toneladas, a lo que se suman las 2,4 toneladas de envases de plástico, latas y bricks y las 3,5 toneladas de papel y cartón que se depositaron en los contenedores amarillos y azul para facilitar su reciclaje. Con esas casi 80 toneladas anuales de restos se podrían llenar dos veces un imponente estadio de fútbol como el Santiago Bernabéu, desde el suelo a la cubierta.

Cabe destacar también que Promedio opera la recogida de residuos urbanos en la demarcación provincial más extensa de España, con una superficie de 21.766 kilómetros cuadrados, a lo que se le añade la dispersión geográfica y la baja densidad de la población poco más de 31 habitantes por kilómetro cuadrado, por debajo de la media nacional (91,13 habitantes /kilómetros cuadrados). Esta situación obliga a la dirección técnica del consorcio a seleccionar de forma adecuada las rutas y implementar sistemas de recogida eficientes que permitan optimizar los trabajos con objeto de reducir costes de gestión y mantenimiento. En este sentido, las rutas de recogida de fracción resto, envases y papel-cartón acumulan cada semana más de 30.000 kilómetros, una distancia equivalente a un viaje de ida y vuelta desde Badajoz a Japón. Prestar servicios de calidad en un entorno rural y con unos costes ajustados para la ciudadanía supone, por tanto, un elaborado estudio de cada actuación aplicando la economía de escala, base de cualquier sistema de gestión supramunicipal.

La tipología de las poblaciones es muy variada, tratándose siempre de municipios menores de 20.000 habitantes. Este sistema, por tanto, acerca las ventajas de la gran ciudad a los pequeños núcleos urbanos dispersos, contribuyendo a fijar población y facilitar la vida y el desarrollo rural del territorio.

En todos los casos, la recogida de la fracción orgánica se realiza a través de un sistema de carga trasera con una periodicidad de seis veces por semana, ampliándose a toda la semana durante los meses de verano en los cuales la mayor parte de las localidades aumentan su población por el retorno temporal de emigrantes extremeños. Uno de los aspectos mejor valorados por los ayuntamientos es precisamente ese refuerzo especial en época estival y durante las fiestas y romerías locales.

De forma paralela a la recogida de la fracción resto se ejecuta el acopio de envases ligeros (fracción amarilla) con una periodicidad semanal. Igualmente el sistema de recogida es de carga trasera, con alrededor de 14.000 unidades de contenedores distribuidos en la provincia de las diferentes fracciones.

En el caso de los envases, Promedio ejecuta la recogida y el transporte de los materiales a los Ecoparques, gestionados por la administración regional a través de la empresa pública Gespesa.

Por otro lado, en lo referente a la recogida selectiva de papel y cartón, Promedio opera este servicio en un mayor número de poblaciones, que gestionan la recogida de las otras fracciones de forma directa o a través de mancomunidad o concesiones administrativas. En total son 130 los municipios integrados en el servicio, superando los 280.000 habitantes atendidos.

La gestión del agua

El abastecimiento de agua potable resulta incluso más sensible. Al fin y al cabo, todos necesitamos agua para sobrevivir. El marco de trabajo es el mismo: una provincia con gran dispersión geográfica y pequeñas poblaciones. Sin embargo, la gestión del agua es más compleja y especializada. Abrir el grifo y que salga agua de forma inmediata es el resultado de un complejo entramado de tuberías e instalaciones y el trabajo de muchas personas.

Ejercer esa responsabilidad sería muy frustrante para un pequeño ayuntamiento si no se contara con el apoyo de las diputaciones provinciales. Con la unión de todos, se generan sinergias y economías de escala que permiten dotar de recursos técnicos especializados y, además, contratar servicios con operadores privados, sin cánones concesionales, contratos de no más de tres años, a los que se les somete a un estricto control público. Promedio utiliza sistemas de telecontrol, transparencia y participación con los entes consorciados, laboratorio de análisis propio, gestión directa del cobro y otras muchas claves que han permitido generar la confianza suficiente como para que, hoy en día, el Consorcio Promedio integre a 37 municipios en abastecimiento de agua en baja, 40 localidades en el abastecimiento en alta y 61 en materia de gestión de depuradoras de aguas residuales.

Durante el año 2018, el consorcio de la Diputación de Badajoz distribuyó 5,4 millones de metros cúbicos de agua a 76.000 personas. Pero quizá el dato más significativo no es lo que se ha suministrado, sino lo que se ha ahorrado. Porque en los últimos 4 años las pérdidas de agua en las redes de suministro se han reducido un 20 por ciento de media o, lo que es lo mismo, en el último año se ahorraron hasta 1 millón de metros cúbicos de agua, gracias a las intervenciones de mejora financiadas con las aportaciones de los usuarios en sus recibos. Mayor disponibilidad de agua para todos y una apuesta por la preservación de los recursos naturales.

La gestión realizada por Promedio en las depuradoras bajo su gestión garantiza que los 26 millones de metros cúbicos que salieron de nuestros desagües se vertieran a los cauces públicos en las mejores condiciones.

En definitiva, tanto en el caso de la gestión del agua como en los residuos, las acciones puestas en marchas por las entidades gestoras como Promedio tienen una repercusión directa en la calidad y en el coste de los servicios para la ciudadanía pero no es suficiente para alcanzar resultados óptimos. Para ello se necesita la colaboración de todos. Separar en los hogares para facilitar el reciclaje, evitar usar el inodoro como papelera o hacer un uso racional y sostenible del agua son algunas de esas buenas prácticas que podemos convertir en hábitos diarios para tener servicios excelentes. Porque, al fin y al cabo, cuidar del medio ambiente y de nuestros recursos naturales, es tarea de todos.