Seguridad y tranquilidad. Esas son las dos claves con las que el Extremadura Hotel de Cáceres trabaja en la actualidad y se enfrenta a la temporada veraniega. Tras una intensa labor como Hotel Esencial durante los momentos álgidos de la pandemia, en los que mantuvo abiertas sus puertas para fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, personal sanitario y transportistas de viajeros y mercancías, ahora retoma el pulso diario a la ciudad como establecimiento de referencia en Cáceres y la región.

Alejandro Picardo, director del Extremadura Hotel, tiene muy claro el mensaje para sus clientes. En el hotel estos encontrarán siempre un espacio de tranquilidad para conocer Cáceres y sus alrededores. Y esa tranquilidad, además, vendrá dada por la seguridad de sus instalaciones frente al contagio del covid-19.

Mientras Alejandro contesta a las preguntas de esta entrevista un operario limpia a conciencia el hall de entrada al hotel. No es coincidencia. Las instalaciones están permanentemente limpiándose, con un máximo de dos horas entre turnos. “Extremadura Hotel se encuentra totalmente preparado para la nueva normalidad y cumple toda la normativa. Todo lo necesario se ha ido implementando poco a poco. Hemos tenido un ‘duro entrenamiento’, al haber estado abiertos durante los momentos más difíciles, lo que nos ha obligado a estar al tanto de todas las novedades en cuanto a seguridad frente al covid-19”, explica.

“Al cliente le queremos transmitir seguridad, pero además se han implementado muchas medidas de higiene, reforzando sobre todo los puntos críticos de contacto como, por ejemplo, la botonera y las barras del ascensor, las manillas de las puertas o la grifería. Intentamos evitar que el cliente haga el contacto y donde no podemos tenemos una limpieza continuada cada dos horas”, explica Picardo.

Uno de los atractivos de Extremadura Hotel es que los clientes pueden disfrutar de la piscina, a la que se realizan exhaustivos controles sanitarios. “En la piscina, a la que solo acceden residentes, se tienen que cumplir con los protocolos, que no es más que multiplicar la higiene y mantener la distancia social de metro y medio”.

Aunque su famosa terraza de verano permanece cerrada, también se ha montado en el porche exterior del hotel unas mesas porque el público de la cafetería prefiere la atención en el exterior. El Extremadura Hotel es muy utilizado en verano por viajeros de toda la península en sus desplazamientos de norte a suroeste.