Más de 1.000 veterinarios trabajan en Cáceres para garantizar la salud de todos

Hay más de 1.000 veterinarios trabajando en la provincia de Cáceres en diferentes áreas de la sanidad, quizás la más visible sea la clínica veterinaria de pequeños y grandes animales, una actividad fundamental para proteger la salud y bienestar animal en nuestros pueblos y ciudades. 

Pero hay muchos otros veterinarios cuyas funciones pueden no ser tan conocidas por los ciudadanos, aunque son igualmente fundamentales en su labor sanitaria, desarrollando tareas de control e identificación animal, desde la administración pública y en el sector privado, trabajando con animales individuales o sobre colectividades tanto de fauna doméstica como salvaje, especializados en équidos o con vocación investigadora, creando vacunas para controlar brotes de enfermedades y prevenir el salto entre especies, formando a otros profesionales sanitarios en cirugía de mínima invasión, mejorando la producción de las explotaciones ganaderas o planteando alternativas al uso de antibióticos para controlar las resistencias antimicrobianas.

Desde el saneamiento de animales de producción hasta el control de alimentos, pasando por la promoción de la salud, los veterinarios cubren un amplio rango de actividades cuyo objetivo final es siempre garantizar la salud pública. 

En los últimos años la pandemia nos ha vuelto a recordar que los patógenos y enfermedades no entienden de fronteras. La OMS estima que existen más de 200 enfermedades infecciosas de origen animal, zoonosis, que pueden afectar al ser humano por contacto directo, a través de alimentos, el agua o el medio ambiente.

Es decir, la salud humana y animal son interdependientes y están ligadas a la salud de los ecosistemas en los que existen, por lo tanto la labor de prevención que se realiza en veterinaria es una herramienta fundamental para garantizar la salud global. 

Código deontológico, garantía de competencia profesional

La vocación de servicio de la veterinaria se rige por el código deontológico. La Organización Colegial se encarga de ordenar la actividad profesional de los veterinarios, velando por la ética y dignidad de la profesión y por el respeto que se merecen los derechos de los particulares. 

De ese modo se garantiza unos altos estándares de competencia y calidad en los servicios veterinarios prestados por los colegiados de la provincia, ajustándose siempre a los principios éticos y los criterios técnico-científicos que rigen la profesión.

Esta es una de las funciones principales y de mayor relevancia de los Colegios, pues la deontología profesional de la veterinaria está vinculada a la protección de la salud en sus tres grandes ámbitos de actuación: la salud pública, animal y medioambiental. 

Un colegio abierto a los ciudadanos

El Colegio de Veterinarios de Cáceres es una institución abierta no solo a los veterinarios sino a todos los ciudadanos de la provincia. A lo largo de los años se han puesto en marcha distintos programas de actuación para fomentar la tenencia responsable de mascotas, prevenir problemas de salud pública en diferentes localidades, combatir las resistencias antimicrobianas tanto en animales como personas y, por encima de todo, fomentar el enfoque One Health en la protección de la salud.

Fundado el 13 de julio de 1906, el Colegio de Veterinarios de Cáceres ha sabido adaptarse y evolucionar con los tiempos, tal y como requiere una profesión sanitaria como es la veterinaria.

Los veterinarios de la provincia de Cáceres actúan diariamente para detectar y controlar patógenos y enfermedades infecciosas de origen animal como la Listeriosis, Salmonelosis, Coronavirus, Gripe Aviar, Virus del Nilo Occidental, Tuberculosis, etc. En definitiva, la labor sanitaria de la veterinaria es fundamental para prevenir y controlar las enfermedades zoonóticas y proteger la Salud y Bienestar Animal, la Salud Pública y la del Medio Ambiente.