Hasta 25 bares y restaurantes de Almendralejo se han adherido a la ruta de la tapa del verano organizada por el ayuntamiento con el objetivo de impulsar al sector de la hostelería tan castigado por la crisis del coronavirus. Comenzó el pasado fin de semana y se prolongará durante dos meses, hasta el 15 de septiembre, ofertando platos típicos de la tierra.
En cada uno de los establecimientos se puede degustar una tapa distinta a precios populares. Hay tapas de bacalao al cheff, tosta de carrillera, migas con huevo y jamón, lagarto ibérico a la brasa, caldereta ecológica con rabo de toro o fondue de carne y queso, por poner algunos ejemplos.
En la oficina de turismo se entregarán unos pasaportes, en los que aparecen seis recuerdos, que se completan con sellos para evular cada una de las tapas. Gracias estos pasaportes se puede conseguir productos de merchandising como una mascarilla personalizada con el eslogan de Almendralejo o bolsas de reciclaje.
Además, la asociación Hostural ha planteado al ayuntamiento la organización de más actividades al aire libre para incentivar el sector, aunque todavía no ha trascendido ninguna.
Por otra parte, el concejal de Turismo, Saúl del Amo, ha pedido a los bares y restaurantes que cumplan con las medidas de seguridad y protocolo aprobadas para combatir el covid-19. Lo dice a raíz de una serie de denuncias que se han hecho sobre varios establecimientos que incumplieron los horarios de cierre la semana pasada. «Si hemos cerrado las calles Luna y Cometa ha sido, precisamente, para beneficio de los hosteleros, por lo que ya dejamos muy claro en una reunión que hay que intentar cumplir con las medidas de seguridad», subrayó.
