Unos 900 escolares de casi todos los centros de Almendralejo y de otras localidades como Alange participaron ayer en la séptima edición de la San Silvestre escolar que organiza cada año el colegio Montero de Espinosa. El gran objetivo de esta prueba es utilizar el deporte como vehículo de solidaridad, pues cada uno de los participantes debe aportar, al menos, un kilo de comida a la Plataforma Solidaria de Almendralejo para repartirlo posteriormente entre familias con menos recursos.

Aunque no se ha realizado el recuento definitivo, se espera que se hallan entregado más de mil kilos de comida, lo que significa casi la mitad de los kilos que la Plataforma Solidaria recoge entre todos los eventos organizados los días previos a la Navidad.

La carrera no tiene carácter competitivo. Los asistentes disfrutaron de una jornada de convivencia con música y bailes.