En esta vida todo es proponerse un sueño y lanzarse hacia él. Algo así debió pensar Julia Salguero Moreno, una joven almendralejense de 17 años recién cumplidos que, en su primera interpretación teatral, casi como si de un juego se tratara, ha sido galardonada con el reconocimiento a la mejor actriz individual en la fase autonómica de los Premios de Teatro Joven Buero, un certamen organizado por Coca-Cola y el Ministerio de Educación, y que es referencia nacional del teatro en edad escolar. Lo suyo es casi insólito, aunque detrás de este éxito hay una profunda vocación secreta por el mundo del espectáculo y los escenarios que Julia nunca antes había confesado.

Todo empezó cuando una profesora del instituto Carolina Coronado les propuso, a ella y a dos compañeros más, preparar una interpretación para afrontar el concurso. "Ni me lo pensé. Acepté porque es algo que me encanta, pero no imaginaba lograr el premio a la mejor actriz", asegura. Su personaje de mujer en la obra El tercer Reich , de Bertold Brech, ha sido crucial. Julia representa a una obrera judía y comunista en la etapa del nazismo. Con David Nieto y Javier del Barco, sus compañeros de batalla, mantiene una conversación en la que expresan las calamidades de aquella sociedad. "Soy una mujer asustada porque acaban de matar a mi marido y no podemos rebelarnos ante nadie. La representación es un diálogo de unos seis minutos donde nos reunimos para ver qué podemos hacer, pero al final se termina sin hacer nada porque, a fin de cuentas, todos sabemos que vamos a morir".

Julia se mete en su papel tanto cuando lo cuenta como cuando lo interpreta: "Estaba metida de lleno en mi personaje. Me puse a llorar desconsolada en el diálogo como si fuera una realidad. Lo cierto es que la obra en sí impacta y creo que el jurado lo ha tenido muy en cuenta. Esto es algo que se lo debemos a nuestra profesora", reconoce.

El pasado lunes recibió su galardón en el Círculo Pacense de Badajoz, con la presencia de Miguel Murillo, director del teatro López de Ayala, Concha Rodríguez, actriz almendralejense y directora de La Estampa Teatro, así como otros actores y directores del panorama nacional. El jurado ha valorado las interpretaciones enviadas a través de vídeos, pero el lunes alguien le insistió a Julia que realizara de nuevo la interpretación ante los presentes. "Y me lancé. Era la primera vez que actuaba ante un público y me sentí muy contenta. Empecé a darme cuenta de verdad que esta es mi vocación y el camino que me gustaría seguir". Tomó el escenario, su vestuario y aunque le faltaron elementos como el fondo o los sonidos alemanes de radio, "que dan otro aire a la obra", se soltó ante todos. Muchos de los presentes quedaron impactados con el papel de la almendralejense y su desparpajo ante una representación tan compleja.

Resulta curioso que, a sus 17 años y esta profunda pasión por el teatro, Julia nunca haya hecho pinitos en este mundo. "Necesitaba algo que me empujara y la experiencia me ha convencido. Ya estuve apuntada a un posible taller que quería sacar Concha Rodríguez en Almendralejo, pero de momento no ha salido. Para ello tendré que irme fuera". En casa, la idea, nunca había convencido. Hasta esta semana. "Mis padres siempre han querido que me dedicara a una profesión más estable y no ven este mundo del teatro con mucho futuro, pero cuando me vieron actuar les ha cambiado el pensamiento. Y de eso también me alegro".

Los estudios

Julia muestra una sensatez y madurez casi impropia de su edad, con un convencimiento inconfundible de lo que quiere. Estudia 1ºde Bachillerato y le encantan los idiomas. Su primera intención es estudiar Traducción e Interpretación, "pero creo que puedo compaginarlo con Arte Dramático". Esta experiencia puede ser su trampolín.

De momento, tendrá la oportunidad de acceder a la fase nacional de un certamen que trata de pescar y retener a los grandes talentos del teatro en edad escolar. A ella le convence la idea de dedicarse al espectáculo: "Me encanta desde pequeña y me ha apasionado el ambiente que he podido vivir estos días con compañeros y algunos profesionales". Miguel Murillo corrió a felicitar a sus cuando vio en primera persona sus aptitudes encima del escenario. Solo el tiempo nos sacará de dudas, pero quizá, este papel, ha sido el punto de inflexión de un diamante teatral en bruto todavía sin pulir.