El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) está pendiente de recibir la autorización de su correspondiente consejo de administración para licitar el nuevo proyecto de supresión de los pasos a nivel, informó ayer el departamento de Comunicación y Relaciones Externas de Adif en Andalucía y Extremadura a este diario.

Estaba previsto que antes de que acabase el verano, las obras estuviesen adjudicadas de nuevo tras producirse una rescinsión del contrato con el anterior adjudicatario, Ploder, pero ni siquiera se ha iniciado el proceso para proceder a la nueva licitación. Según dicha fuente, la finalización de estos trabajos se encuentran actualmente en "fase de supervisión", es decir que está aprobado el nuevo proyecto para terminar la obra y pendiente de la autorización para su nueva licitación y contratación.

Fue en el 2007 cuando Adif adjudicó a Ploder la supresión de nueve pasos a nivel pertenecientes a la línea Mérida-Los Rosales por un importe de cuatro millones de euros y un plazo de ejecución de 18 meses. De estos nueve pasos, siete se localizan en Almendralejo. Meses después se iniciaron las obras y en el transcurso de su ejecución surgieron diversos problemas que provocaron un retraso acumulado, que Adif reconoció y calificó de "importante". Dichos retrasos se debieron a una modificación "sobre la marcha" de algún proyecto de supresión de paso a petición del Ayuntamiento de Almendralejo; a la tardanza en la disponibilidad de los terrenos necesarios (los últimos con fecha de agosto del 2009, según Adif) debido a las complicaciones surgidas en el proceso de expropiaciones y, principalmente, a que la empresa adjudicataria Ploder entró en concurso de acreedores. Tras producirse esta última situación, Adif tramitó el acto de supresión del contrato y ésto le obligó a retomar el proceso de licitación y adjudicarlas de nuevo.

Hasta el momento que se paralizaron las obras (hace casi dos años), Ploder ejecutó parte del proyecto. Según Adif se suprimieron dos (uno de ellos el de la calle Carmen Flores) y otro quedó a medias, ya que durante su ejecución se paralizaron las obras. Esta circunstancia obligó a tener que modificar el proyecto inicial y eliminar las actuaciones ya realizadas. Incluso, el consistorio aportó una serie de cambios al proyecto aprobados en sesión plenaria por toda la corporación el pasado febrero.

QUEJAS Por otro lado, está pendiente una reunión próxima de los responsables de Adif con la Junta de Extremadura para tratar las obras pendientes en la región. Mientras, el próximo noviembre se cumplen dos años desde que se paralizaron las obras y aún el paso a nivel del camino Alange está por terminar. A pesar de que en este tiempo se han hecho actuaciones para aumentar su seguridad, los vecinos siguen reclamando agilidad para que se acabe de una vez.