La Dirección General de Producciones y Mercados Agrarios del Ministerio de Agricultura ha resuelto que se amplíe en 0,1 hectáreas la superficie destinada a la producción de cava; otro 0,1 para replantación y cero para la conversión. La resolución, a la que ha tenido acceso El Periódico Extremadura, se conocerá en unos días y supone un jarro de agua fría en las aspiraciones de producción de caldos espumosos en Tierra de Barros que esperaban poder ampliar la superficie de cultivo destinado a este tipo de vino.

El cava extremeño representa menos del 5% de la superficie dentro de la Denominación de Origen y que embotella solo el 2,5% del total. En los últimos años ha habido un crecimiento de la facturación importante, tal y como que se pone de manifiesto en los datos publicados por el ministerio de Agricultura. En 2017, por ejemplo, fue del 6,5% con un valor total de 1.149 millones de euros. Desde el sector en Almendralejo se sostiene que no hay razones de limitación respecto a la comercialización, ya que el incremento de venta de botellas en 2017 fue de más de un 3%, lo que se traduce en un aumento de comercialización de 7,5 millones de botellas hasta alcanzar los 252,5 millones. El cava extremeño solo produce seis millones de botellas.

La resolución de Agricultura sigue casi al pie de la letra las recomendaciones vertidas por el Consejo Regulador de la Denominación de Origen Protegida 'Cava'. Si en 2018 estableció una limitación del 0,52 % para 2018 que, en la práctica, suponía un tope 172,2 hectáreas nuevas aplicable a las solicitudes de 2018 para nuevas plantaciones, este año es de 0,1 hectáreas, lo que en la práctica supone cero ampliación.