A pesar de que los trabajos de recuperación del yacimiento de Huerta Montero están prácticamente finalizados y en el último año se ha ido posponiendo su apertura, la Consejería de Educación y Cultura no tiene aún una fecha fijada para que abra al público y para que se celebre su inauguración.

Dicha consejería ha asegurado a este diario que ahora no se puede celebrar el acto de inauguración al estar en período de elecciones nacionales, pero la intención es que cuando pase el 20 de noviembre se pueda abrir al público en breve este yacimiento arqueológico en Almendralejo.

Cultura tampoco quiso especificar si aún falta algún trabajo por acometer, aunque el concejal José Antonio Regaña aseguró, en el pleno del lunes, que todavía hay pendientes actuaciones relacionadas con el suministro de agua y electricidad de este nuevo centro de interpretación.

El concejal esta declaración para contestar a una pregunta del grupo PSOE-regionalista que quería saber cuándo el equipo de gobierno pondrá en marcha las visitas a dicho yacimiento cuyas obras de acondicionamiento estaban ya terminadas en el pasado mes de mayo.

Según Regaña, sin embargo, aún faltaban por hacer los trabajos para llevar estos servicios al yacimiento, ubicado en la Vereda Corona, ya que aseguró que cuando constituyeron el equipo de gobierno no había agua y la gestión para dar de alta la luz tampoco estaba hecha. Sí reconoció que la obra está terminada y que "en breve" la concejalía de Cultura dirá cuándo se abrirá al público.

RESTOS En este yacimiento se halla una importante tumba colectiva de la Edad de Cobre y para su recuperación se ha hecho una inversión de más de 200.000 euros. Se trata de una de las actuaciones integradas en el Proyecto Alba Plata II, que lleva a cabo la Junta de Extremadura en varios municipios extremeños cercanos a la Vía de la Plata. Esta tumba colectiva tiene más de 115 personas enterradas, de las que casi el 40% son niños. La empresa almendralejense Procondal se ha encargado de hacer la recuperación del yacimiento y adecuarlo para recibir visitas, mientras que el arqueólogo Paco Blasco almendralejense ha supervisado los trabajos.