Con la finalidad de proteger lo que este grupo considera como «un encanto turístico, histórico y artístico de Almendralejo», ha nacido la asociación Amigos de las chimeneas. De momento, no se ha registrado de manera formal, pero cuenta ya con 11 asociados que tratarán de reunirse de manera periódica para organizar actividades para proteger estas chimeneas gigantes.

Hace unas semanas, Manuel Rodrigo Asensio, Sonia Montero y Pepe Antolín ofrecieron una rueda de prensa para dar a conocer las intenciones de estos defensores del patrimonio cultural de la ciudad. Entre las primeras acciones, planean encuentros con los propietarios de las chimeneas, reuniones con los gobernantes y candidatos a la alcaldía, la posible elaboración de una revista anual y la posibilidad de recibir donaciones voluntarias.

Al día de hoy hay registradas nueve chimeneas gigantes: dos en Bodegas Montero, en calles Luna y San Roque; la alcoholera Gómez, la de Alcántara, en calle Badajoz; la de Francisco Javier Merino, en calle Santa Ana; la de la alcoholera de Zacarías de la Hera; la de San Antonio, la chimenea de alcoholera Extremeña, actual Museo del Vino; y otra situada en los patios del supermercado Lidl.