La concejala de Bienestar Social, Isa Ballesteros, ha dado a conocer el paquete de medidas sociales impulsado por el ayuntamiento de Almendralejo para combatir las consecuencias de la crisis del covid-19. Las medidas provocan un aumento del gasto social y repercute en que unas 300 familias más se beneficien de estas ayudas.

Según datos proporcionados por el consistorio, durante la crisis ha habido un aumento de familias que demandan ayudas y precisan la intervención de diferentes agentes. Así las cosas, el Economato Social ha pasado de atender unas 60 familias a atender a más de 100. Cruz Roja atendía a 52 familias antes y ahora llega a más de 230. Cáritas pase de 86 a 220 familias atendidas. Provida pasa de 32 a 40 familias, mientras que la Asociación Progreso Inmigrante también ha pasado de cuatro a siete familias.

De otro lado, este viernes 5 de junio, la Comunidad Islámica de Almendralejo ha entregado más de 300 kilos de alimentos a Cruz Roja para su posterior reparto a las familias atendidas.

Medidas

Entre las medidas sociales incluidas en el Plan Suma, se encuentra el impulso al servicio de teleasistencia con 4.000 euros de inversión. Es un servicio de apoyo y atención a personas que tengan dificultades en casa, situaciones de emergencia, soledad o aislamiento. Está gestionado por Cruz Roja. En los últimos años ha ido disminuyendo y se atendía a 46 personas. Ahora se espera llegar a 100 terminales activos.

Asimismo, se contempla ampliar la cantidad destinada a becas para el estudio de cara al próximo curso. Habitualmente, la partida destinada para becas era de 7.450 euros. Este año esa partida se incrementa en 10.000 euros más para alumnos de infantil, primaria y secundaria. El dinero irá destino a la compra de libros y de material fungible para alumnos de infantil que no pueden optar a becas del Estado, mientras que para alumnos de primaria y secundaria servirá para material fungible.

Además, el programa de emergencia social destina 25.000 euros a familias en situación de vulnerabilidad. Sirve para sufragar mínimos vitales como pagos de alquiler, hipoteca, alimentación, farmacia y otros conceptos, siempre evitando duplicidades con otras ayudas. Esa bolsa se ha incrementado ahora con 20.000 euros más.

También se amplía el programa de atención y ayuda a domicilio con más trabajadores y número de horas de atención.