Tras llevar casi 11 meses de clausurada, la biblioteca municipal reabre hoy sus puertas al público, con su horario habitual, después de que hayan finalizado por completo los trabajos de reparación de la cubierta del centro cultural donde se ubica y tras la reordenación de todos los libros y material, tarea que ha llevado casi tres semanas a los trabajadores.

El alcalde José García Lobato dio la noticia y aprovechó para pedir disculpas a los usuarios por el tiempo que ha estado cerrada la sala, pero quiso dejar muy claro que «no es por hechos achacables al ayuntamiento, sino por la falta de respuesta y cooperación de la Junta de Extremadura» para sacar adelante esta actuación.

Los hechos se remontan a medidados de febrero, cuando se produjo la rotura de una viga de la sala de exposiciones, momento en el que el equipo de gobierno decidió clausurar la parte alta del conventual, donde está la biblioteca. El alcalde aseguró que tras el derrumbe de la sala de lectura infantil de 2011 «no era momento de arriesgar», en relación a la seguridad de los ciudadanos. Desde el equipo de gobierno se prefirió evaluar cómo estaba la cubierta y se encontraron zonas en mal estado en la sala de la biblioteca, redactando su reforma.

El alcalde recuerda que pidieron ayuda para llevar a cabo la obra a la Junta, «pero no obtuvimos respuesta», acometiéndose la actuación solo con fondos municipales. Recordó que la Junta tardaba meses en dar una respuesta y hasta el 1 de septiembre el consistorio no tuvo luz verde de la Junta para hacer la obra, de ahí apuntan el retraso.