El concejal de obras e infraestructuras, Juan Daniel Bravo, ha informado de que la planta alta del centro cultural San Antonio seguirá clausurada "hasta que podamos garantizar la máxima seguridad para los ciudadanos y trabajadores". El edil dio cuenta del análisis que se está llevando a cabo sobre la cubierta del edificio, después de que a mediados de febrero se descolgara una viga cercha de la sala de exposiciones, espacio anexo a la biblioteca municipal. Entonces se decidió clausurar la parte alta, trasladando el servicio de biblioteca al centro cívico y el de prestación de libros al archivo municipal, en la avenida de San Antonio. Allí seguirán, de momento, por tiempo indefinido.

La empresa Elaborex está siendo la encargada de realizar un estudio de procesos patológicos de las vigas de madera y de los muros donde apoyan. Han tomado muestras de 14 puntos de apoyo y han inspeccionado 63 puntos de coronación de las vigas. Analizan la humedad, pudrición o la presencia de posible presencia de hongos, entre otros asuntos.

También realizan ensayos para ver el estado del material con el que fueron construidos los muros. Prevén que para mediados de abril estén ya finalizados los estudios y la valoración final del servicio de urbanismo del ayuntamiento. Después se adoptarán soluciones.

Bravo también alertó de un hecho destacable. La construcción de la cubierta, y más exactamente el sistema de apoyo de las vigas en los muros, no se corresponde con los planos del proyecto que obran en poder del ayuntamiento y que datan de 1991. La obra fue realizada en su momento por la Consejería de Cultura y Patrimonio. El edil también dijo que desconocen si en su momento se produjeron modificaciones del proyecto, aunque en ese caso no están en conocimiento del consistorio.

Una vez esté elaborado el informe definitivo de daños, el ayuntamiento tiene previsto comunicárselo a la Junta de Extremadura para "depurar responsabilidades", ya que es muy posible que se tengan que realizar obras para modificar el techo.