Los indicios de que puede haber más restos arqueológicos en el paraje de la Vereda Corona, donde está el sepulcro prehistórico Huerta Montero, han provocado que se inicie una búsqueda de los mismos para confirmar su existencia.

Ayer, se hicieron pruebas con un georadar para comprobar esos indicios, en las que participaron varios técnicos y científicos de la Universidad de Extremadura y de la portuguesa Universidad de Evora, así como topógrafos y el arqueólogo almendralejense Paco Blasco, que fue uno de los que se encargó de descubrir y estudiar el sepulcro.

Aunque la lluvia dificultó los trabajos, estuvieron todo el día pasando el georadar por la parcela. El yacimiento recuperado se encuentra cubierto por una nave, pero sus alrededores están protegidos por un cerramiento formando así una parcela a la que es difícil de acceder. La idea es ajardinar esa zona, pero antes se quieren cerciorar de que realmente hay más restos prehistóricos. De ahí, la presencia del georadar, que estuvo realizando mediaciones con una profundidad de unos dos metros y medio por debajo del suelo, según uno de los científicos portugueses.

Las previsiones de que haya más restos son muy altas, según manifestó Paco Blasco, y el propio alcalde de Almendralejo, José García Lobato, quien visitó las instalaciones, porque la presencia del sepulcro hace indicar que hubiera algo más cerca de él. Tienen varias hipótesis de lo que podrían ser, pero lo más lógico es que sea una necrópolis de la misma época.

REFLECTORES Las primeras pruebas con el goeradar detectaron varios reflectores en la zona, pero ahora se deben estudiar bien para determinar qué es lo que ha recogido y de qué tipo de estructura se trataría en el caso de que fuera un yacimiento arqueológico.

En el caso de confirmar estas hipótesis, Lobato anunció ayer que se elaborará un proyecto que se enviará a la Junta de Extremadura con el único objetivo de recuperarlos y ponerlos en valor como se hizo con el sepulcro histórico de Huerta Montero.