Ante la falta de playa y de paseo marítimo, a los almendralejenses no les queda otra que refrescarse del sofocante calor de este verano en la piscina, o bien sentados en algunas de las múltiples terrazas repartidas por las diferentes calles de la ciudad. Aunque lo cierto es que la mayoría están concentradas en unas pocas vías.
Es el caso de las calles Francisco Pizarro, Cometa, Suárez Bárcenas o la avenida de la Paz. En cada una de ellas hay más de seis terrazas. El trasiego de gente y la tranquilidad que piden los usuarios de las mismas han hecho que ocho empresarios de la calle Cometa soliciten al ayuntamiento que peatonalice la vía durante el horario de las terrazas en el periodo estival, como ya ocurría hace varios años.
El ayuntamiento ha denegado la petición después de ver el informe de la policía local en la última junta de gobierno. Según recoge, "cortar la calle supone un perjuicio al tráfico, máxime cuando es uno de los aspectos más criticados en la actualidad por los ciudadanos". Añade que "implicaría que otros propietarios de terrazas soliciten lo mismo, como los de las calles Suárez Bárcenas o La Paz". No obstante, la policía recuerda que todos los "titulares de las terrazas deben limitar la misma con vallas para garantizar la seguridad de los usuarios o clientes, tal como se especifica en las condiciones de concesión de terrazas".
Además, señalan que "el corte de la calle al tráfico propiciaría la realización del botellón y aumentaría el ruido en la zona", según indica la policía en su informe.
Por ahora, ya son 32 establecimientos de Almendralejo los que han solicitado la licencia para instalar una terraza.
