Un 24,63% de las empresas e instituciones que se han adherido a la futura Ruta del Vino Ribera del Guadiana son almendralejenses. La componen 138 firmas, de las que 34 son locales.
Según la concejala de Turismo, Victoria Pérez, a simple vista puede parecer que son pocas, pero aseguró que no es así, ya que hay que tener en cuenta que son muchos los ayuntamientos y oficinas de turismos de diferentes localidades de la región los que se han sumado a este proyecto. "Tenemos que tener en cuenta que esta ruta del vino no es solo de Almendralejo y de la comarca de Tierra de Barros, sino que abarca toda Extremadura", comentó. Por esta razón, se mostró satisfecha por la acogida que está teniendo en la región y con el interés prestado tanto por las instituciones públicas como por las empresas privadas, sobre todo bodegas y hosteleros.
ALGUNOS EJEMPLOS Entre las empresas locales se encuentran 11 bodegas, tres hoteles, cinco restaurantes, tres bares de vinos, cuatro establecimientos comerciales, cuatro empresas relacionadas con el ocio y tiempo libre (como una compañía de teatro), una asociación, una empresa de servicio de transporte y la oficina de turismo.
En cuanto a los municipios extremeños que se incluyen están Alange, Cañamero, Santa Marta de los Barros, Mérida, Olivenza, Los Santos de Maimona, Trujillo, Villa de Alía y Villafranca de los Barros. Mientras que las instituciones que están son el Consejo Regulador de la Denominación de Origen Ribera del Guadiana, la Confederación Regional Empresarial Extremeña, la Confederación Empresas turísticas de Extremadura, la Diputación de Badajoz, la Federación para el Desarrollo de Sierra Grande y Tierra de Barros (Fedesiba), la Asociación para la Promoción y el Desarrollo de la Comarca de Villuercas Ibores Jara (Aprodervi) y la Junta de Extremadura que ha incluido esta iniciativa en su Plan de Dinamización Turística.
CAMBIOS DE ESTABLECIMIENTOS Muchas de estas empresas han tenido que adecuar sus establecimientos a las reglas que exige el Gobierno central para formar parte de la ruta del vino. Según explicó ayer Pérez, sus responsables han recibido instrucciones de cómo las deben de hacer y se han hecho cargo de sus costes y señaló que algunas aún continúan adaptando sus empresas. Además, sus dueños o encargados han asistido a cursos de formación durante dos meses para saber cuáles son sus cometidos en la ruta. Estos se han celebrado durante los meses de noviembre y enero en el Palacio del Vino y la Aceituna.
Con esta ruta del vino, el ayuntamiento y todas sus integrantes pretenden ofrecer a los turistas una nueva forma de conocer la región a través de un turismo diferente, con el que se saca el mayor provecho a la geografía, el vino, el cava y la gastronomía extremeña. Así, desde hace dos años se está confeccionando esta ruta que está a la espera de que la Secretaria General del Ministerio de Industria, Turismo y Comercio conceda al ayuntamiento la certificación necesaria para que funcione. Pérez calcula que para finales de este año el ministerio ya se habrá pronunciado y la Ruta del Vino Ribera del Guadiana entre a formar parte de las rutas del vino de España, siendo la primera y la única que hay en Extremadura. "Ahora tienen que ir visitar las empresas e instituciones para ir ver si cumplen con la normativa que exigen", comentó.
El ayuntamiento apuesta "muy fuerte" por su consecución y el desarrollo, ya que considera que se trata de un buen reclamo turístico. Por ello, han editado una guía, que se presentó en la pasada Feria Internacional del Turismo, en la que se explica qué es una ruta del vino, en qué consiste ésta y cuáles son las empresas adheridas. Se han editado 3.000 ejemplares que ya se están repartiendo en las oficinas de turismo incorporadas a la ruta.
