Cuántas veces hemos mirado a las paredes de casa, a las estanterías del salón o a ese despacho deslucido y solitario que sólo tiene horas de trabajo y está desnudo de recuerdos e imágenes. O, en otro contexto, cuántas veces nos ha recordado Facebook lo bien que lo pasamos en nuestras vacaciones, con algún amigo especial o en alguna escapada y, sin embargo, ya no sabemos dónde están las fotos de aquel día. O peor aún. ¿Te acuerdas de esas fotos chulísimas que estaban en tu teléfono móvil antes de que se rompiera o claudicara la memoria y perdieras todo el contenido?

Rescatar todas esas fotos del limbo, trasconejadas por la sociedad de las prisas, es el gran objetivo de Alberto del Castillo, maestro de la fotografía en Almendralejo y responsable de Miró Fotógrafos. Ha lanzado un servicio para que esas fotos ya no se pierdan, sino que se impriman y queden para siempre. Todo, a golpe de click.

En su página web (www.mirofotografos.com), ha habilitado la sección ‘Impresión online’. En ella, permite imprimir a un click cualquier foto desde cualquier dispositivo móvil. “Haces una foto, te encanta y la imprimes. A un precio tirado y con la posibilidad de recogerla cuando quieras, pero con la seguridad de que ya no la vas a perder nunca”.

El servicio es rápido, intuititivo y económico. Pide un registro sólo para la primera vez y, lo demás, es sencillo. Puedes imprimir fotos de todo tipo de tamaños, crear collage personalizados, tarjetas de felicitación, marcapáginas, calendarios e, incluso, album de distintos tamaños. Desde el mismo móvil o PC puedes subir las fotos. El programa te permite encuadrarlas e, incluso, editarlas desde el mismo hueco para la imagen. “Tenemos un motor de automaquetación muy potente y muchas posibilidades tanto en tamaños como en precios”. Haces click y el encargo está hecho. Tan sólo basta con pasar por la tienda de Miró Fotógrafos, en el número 26 de la avenida de la Paz de Almendralejo, y recoger las fotos pagando en la tienda. Así de fácil.

“Hay quiénes se acostumbran de esta manera a tener pequeños album de fotos de sus eventos. Un día de campo, una visita a una ciudad, una boda. Esas fotos ya quedan impresas y no se pierden en los teléfonos”. Porque los móviles se han convertido en baúles de fotografías. Y, en ocasiones, ya ni encontramos aquella imagen que nos había gustado mucho de hace tiempo. Incluso es posible que la borráramos.

Alberto del Castillo, que cuenta con uno de los estudios fotográficos más prestigiosos de la región, ha sabido detectar el problema del día a día con las imágenes. Además, el servicio guarda la confidencialidad de los autores, “ya que nosotros sólo accedemos al nombre y al teléfono para cualquier dato y las imágenes no las vemos, salen automáticamente impresas”.