El portavoz del equipo de gobierno, Luis Alfonso Merino, ha salido al paso del comunicado emitido por la Plataforma contra la Contaminación que hablaba de falta de gestión del consistorio en la lucha contra los vertidos de residuos. Desde el ayuntamiento aseguran que no existe contaminación medioambiental en ninguno de los tres arroyos (Las Picadas, Harnina y Charnecal) y que se actúa "de forma inmediata" ante cualquier rotura que hay en la red y que se produce algún "vertido extraordinario, no vertidos incontrolados como dice la plataforma".
El concejal tilda de "sesgada" la información de la plataforma, puntualizando que en 2015 solo hubo un desbordamiento en la zona de aliviaderos producido por insuficiencia del colector, dada la obsolescencia de un emisario con más de 40 años. Critica también que indiquen que son "vertidos incontrolados" cuando en realidad, según el informe del técnico municipal, queda registrado que cuando hay una rotura del emisario existe una detección inmediata, comunicación a la confederación hidrográfica y obra de sustitución de la zona afectada. Solo en 2015 han cambiado más de 500 metros lineales de emisario por microrroturas o hundimientos fortuitos. "Son vertidos por cuestiones extraordinarias que nadie las prevé ni las quiere, pero que cuando se producen, se solucionan", asevera Merino. También habló de la necesidad de tener financiación para el nuevo colector, aprobado por Agricultura.
Con respecto a los puntos de control, aclara que el informe deja claro que los vertidos se producen en la red de saneamiento, ya que ninguna industria tiene autorización para verter residuos a los arroyos.
LAS COMPROBACIONES Hay siete puntos que identifican si un vertido supera los parámetros de PH o conductividad que establece la legislación. Merino explica que cuando una industria supera dicho límite, el vertido llega a la depuradora y allí se produce una alteración, pero acaba depurándose el vertido y siendo enviado a los cauces de los arroyos conforme a los parámetros legales, "por lo que no hay contaminación medioambiental". Añade que con las herramientas que se tienen es muy complejo sancionar a las industrias, salvo que sea un vertido muy continuado y las muestras se tomaran con rapidez, pero en el informe se indica que son intermitentes.
El ayuntamiento sí reconoce que no cumplió con el plazo que estipula la normativa para entregarle la documentación requerida a la plataforma (un mes), pero le pide que valore que las consecuencias de esto no son graves, aludiendo a carga de trabajo del funcionario que hizo este informe. Recuerda también que ayuntamiento y plataforma persiguen los mismos objetivos y que no deben estar enfrentados.
