Las condiciones en las que España afronta la 'nueva normalidad' post-coronavirus, ya han quedado legalmente fijadas. El Consejo de Ministros dio luz verde al Decreto Ley que recoge todas las medidas a seguir en los próximos meses en todos los ámbitos. Estas medidas han entrado en vigor el 21 de junio de 2020. Vuelven como novedad, todas las actividades, siendo requisito indispensable como hasta ahora el mantener la distancia mínima de seguridad, así como el uso de mascarillas. En caso de no hacerlo, se han regulado sanciones para todas aquellas personas que incumplan las normas.

Algunas de las medidas más significativas son las siguientes: Con respecto a la movilidad libre, estarán permitidos los desplazamientos por todo el territorio, incluyendo los trayectos entre provincias y comunidades autónomas. Estas limitaciones estaban fijadas desde que se estableció el estado de alarma, el pasado 14 de marzo. La utilización de mascarillas será obligatoria para las personas de 6 años en adelante en todos los espacios, independientemente que sean cerrados o abiertos, siempre que no se pueda mantener la distancia de seguridad de 1,5 metros, siendo obligatorias también en los medios de transporte aéreo, marítimo, en autobús o por ferrocarril, así como en los transportes públicos y privados complementarios de viajeros en vehículos de hasta nueve plazas, incluido el conductor, si los ocupantes de los vehículos de turismo no conviven en el mismo domicilio. Su uso sigue siendo clave para evitar la propagación de la pandemia. En el transporte, tanto en los públicos de viajeros de competencia estatal como en los marítimos se deberá recabar información de contacto para todos los pasajeros y conservar los listados un mínimo de cuatro semanas con posterioridad al viaje ante posibles rebrotes. Estará permitida la vuelta al trabajo presencial de manera progresiva, manteniendo la distancia de seguridad. Se debe potenciar el teletrabajo en aquellos sectores que sea posible. Las empresas deberán adoptar medidas de ventilación, limpieza, higiene y desinfección adecuadas a las características de cada centro de trabajo. En lo que a los centros sanitarios se refiere, se deberá garantizar que se adopten las medidas organizativas, de prevención e higiene para asegurar el bienestar de los trabajadores y de los pacientes.

Asimismo, será necesario disponer de los materiales de protección necesarios en las ubicaciones pertinentes, la limpieza y desinfección de las áreas utilizadas y la eliminación de residuos, así como el mantenimiento adecuado de los equipos e instalaciones. En las residencias, se deberá velar por el cumplimiento de las normas de desinfección, prevención y acondicionamiento de las instalaciones. Tendrá que garantizarse la coordinación entre los sistemas de salud de la comunidad autónoma y los centros residenciales de personas con discapacidad, de personas mayores y de los centros de emergencia, acogida, etcétera. Trabajadores, usuarios y visitantes deberán tener a su disposición los materiales de protección adecuados al riesgo de la covid-19. Con respecto a los recintos educativos, la competencia recae en las comunidades desde la fase 2. Ellas tienen la potestad de establecer el regreso y las medidas correspondientes. Lo único que regula el decreto es que se deben evitar aglomeraciones y garantizar que se mantenga la distancia de seguridad.

En todo establecimiento destinado al comercio de cualquier sector, será fundamental que no se produzcan aglomeraciones, garantizando que exista una separación de seguridad siempre, entre clientes y trabajadores. En alojamientos turísticos, se asegurará que en las zonas comunes se adopten las medidas organizativas oportunas para evitar aglomeraciones y garantizar una distancia interpersonal mínima. En hostelería, restauración y actividades recreativas, se tomarán las medidas de organización necesarias para evitar las aglomeraciones tanto en el interior como en el exterior de los establecimientos, llevando siempre un debido control para evitar la concurrencia de las personas.

CONSULTORA DE HIGIENE trabaja elaborando protocolos de higiene preventivos y/o correctivos con el fin de fortalecer todas las normas de seguridad, higiene y desinfección en empresas de cualquier sector, para que tanto trabajadores, como clientes, tengan el derecho a un regreso seguro a la nueva normalidad.