TVtivimos tiempos de grave crisis y de apuros económicos. Sobre todo los "padecen" los más desfavorecidos de nuestra sociedad. Los poderes públicos y los organismos financieros retocan a la baja presupuestos, recortan ayudas y anulan subvenciones. La Iglesia, por el contrario, ante las peticiones cada vez más numerosas de personas necesitadas, incrementa su labor asistencial. Para verificarlo, solamente hay que visitar las sedes de Cáritas. Una razón poderosa para que sigamos ayudando un año más. Y una buena forma de ayudar a la Iglesia Católica es marcar la "X" en la casilla correspondiente del impreso de la Declaración de la Renta. En el último ejercicio contabilizado -2008- hubo 237.143 declaraciones más a favor de la Iglesia. Son ya nueve millones los españoles que deciden asignarle, sin que paguen más ni les devuelvan menos, el 0I7 % de sus impuestos.

Esta generosidad de los católicos y de los que, sin serlo, aprecian la labor que desarrolla la Iglesia, supone el 20 % del presupuesto anual de la misma. El resto - el 80 %- se cubre con las colectas dominicales y demás donativos voluntarios de los fieles. El dinero cunde, se multiplica, en manos de la Iglesia. Con poco dinero ella sigue haciendo mucho a favor de tantos que necesitan sus servicios. Por eso cuantos marcamos la "X" nos sentimos colaboradores activos de su misión, valoramos lo que ella ha supuesto en nuestras vidas y lo que puede suponer para los miles de personas a los que llegue su mano extendida. Marcar la "X" no cuesta nada y, sin embargo, rinde mucho. Pongámosla todos en el impreso de nuestra Declaración de la Renta. No nos pesará.