La policía local detuvo el jueves, a las 20.30 horas, a un hombre de 24 años, de nacionalidad rumana y vecino de Almendralejo, tras comprobar cómo un turismo, un Seat Toledo, era conducido con las manos al volante por un niño de 4 años que iba sentado entre las piernas de su padre que ocupaba el asiento del conductor. Ocurrió en el cruce de la calle Alfonso X con Divino Morales, una zona muy transitada por numerosas personas que salían del polideportivo municipal.

Según informó la policía local en una nota, el detenido reconoció los hechos manifestando que su hijo iba conduciendo el vehículo porque "si no lloraba y así se callaba". Fue informado de la ilicitud penal que su conducta llevaba implícita por la peligrosidad y temeridad del hecho.

Por dicho motivo se le instruyeron diligencias judiciales como supuesto autor de un delito contra la seguridad vial. Además, ninguno de los dos llevaba puesto el cinturón de seguridad. El atestado instruido por la Unidad de Atestados de la policía local fue remitido a la Autoridad Judicial, a disposición de la cual quedó el supuesto autor del delito.