El autor del robo a mano armada en la oficina de Cajalmendralejo situada en la calle Ortega Muñoz que fue perpetrado el pasado miércoles 14 de diciembre ha sido detenido por agentes de la Policía Nacional en una rápida intervención que apenas duró 48 horas, según han informado fuentes de la propia investigación. El ladrón, un hombre de 38 años de edad y con un amplio historial delictivo, robó a punta de pistola durante esa mañana en esta sucursal y se llevó 1.845 euros que había en una de las cajas de seguridad. Ha sido puesto a disposición de la autoridad judicial que ha decretado su ingreso en prisión.

Los hechos sucedieron de manera vertiginosa y en apenas unos minutos cuando el atracador entró en la oficina de Cajalmendralejo a las 8.40 horas de la mañana portando una pistola y amenazando a las dos únicas personas que en esos momentos allí se encontraban, una empleada de la entidad y la limpiadora habitual. El atracador ocultaba su rostro con una capucha y una braga, ambas de color negro, y amenazó gravemente a la limpiadora. Se dirigió con la pistola a la empleada y le gritó «ábreme o la mato», refiriéndose a la limpiadora. La cajera, que se encontraba en el habitáculo antiatracos que tiene la oficina, abrió la puerta y dejó pasar al ladrón, quien no dejó en ningún momento de apuntarle con la pistola. Al mismo tiempo le gritaba que le diera todo el dinero. Nada más hacerse con su objetivo se marchó a la carrera del lugar de los hechos.

DATOS E IMÁGENES / Los agentes policiales, que llegaron instantes después, recopilaron rápido los datos e imágenes que a posteriori fueron claves para la identificación del atracador. Gracias al testimonio de la cajera, la limpiadora y algunos viandantes que se encontraban cerca de la oficina y que vieron salir a toda prisa al ladrón, los agentes pudieron recabar la descripción física, vestimenta y el vehículo de huida. La investigación culminó en apenas 48 horas y el viernes ya había sido detenido el infractor. Los agentes realizaron el preceptivo registro de su domicilio, donde se intervinieron dos revólveres metálicos, ambos de juguete, aunque uno de ellos estaba manipulado con la intención de poder suministrarle munición real. Eran similares al utilizado el día del atraco.

Cabe recordar que nada más producirse el suceso, una ambulancia hizo acto de presencia en la oficina para atender tanto a la cajera como a la limpiadora que instantes después de lo sucedido se encontraban en estado de ansiedad, aunque afortunadamente no se produjo ningún daño físico.

Desde su puesta en funcionamiento, es la segunda vez que tratan de robar en esta oficina de Cajalmendralejo situada en calle Ortega Muñoz. La primera vez fue en abril de 2012, cuando un asalto de similares características y a una hora muy parecida, se saldó sin robo porque el varón que amenazó a las empleadas con un cuchillo de grandes dimensiones terminó huyendo sin hacerse con el botín. La oficina está situada en el barrio de San José, a escasos metros de una oficina de policía local.