Han sido unos días de tristeza generalizada en Almendralejo tras conocerse la pérdida de Tobías Medina Cledón (1930-2016), conocido más gentilmente por todos los vecinos como don Tobías y que falleció el pasado martes víctima de un infarto que le sobrevino cuando se encontraba en la residencia Nuestra Señora de la Soledad de Badajoz, donde ha pasado los últimos días de su vida por su delicado estado de salud. Don Tobías se marcha a sus 86 años y después de vivir los últimos 30 en Almendralejo, donde será recordado como «un hombre bueno», prácticamente la expresión más repetida de entre los muchos amigos y vecinos que acudieron a despedirle el pasado martes en su funeral.

Fueron centenas de almendralejenses los que acudieron primero a la capilla ardiente instalada en el santuario de la Piedad, donde don Tobías fue párroco durante 22 años y rector emérito de la ermita. Allí se colocó su féretro ante la presencia de la imagen de la Virgen de la Piedad, que le presenciaba con un manto negro en señal de luto. La patrona de Almendralejo es más grande gracias, en parte, a la pasión que Tobías Medina le dedicó durante décadas. Desde su llegada conectó con ella y fue el encargado de que se le impusiera el título de Alcaldesa perpetua de Almendralejo, una distinción aprobada en el pleno de agosto de 1987. Su devoción también le llevó a impulsar la coronación canónica de la Virgen de la Piedad en 2007.

De entre todo su legado cultural, la creación del Museo Devocional inaugurado el 15 de agosto de 1995 fue su principal obra. El contenido de este centro, durante muchos años, se debió al trabajo constante para la realización de obras y las donaciones que iban llegando. En 2005 fue ampliada su capacidad con más de 400 metros cuadrados. Ubicado junto al santuario de la Piedad, es hoy en día uno de los reclamos turísticos por excelencia de la ciudad mostrando a los visitantes los objetos que la fe religiosa de los almendralejenses y el amor a su patrona han ido depositando en su vitrinas.

VIDA SOCIAL/ Además de haber sido párroco de la Purificación y rector de la Piedad, Don Tobías se convirtió en un almendralejense de calle más. Se mezcló con la gente como si hubiera nacido en la capital de Tierra de Barros. Fue profesor del centro universitario de Santa Ana durante 14 años y dirigió una Hoja Parroquial llamada La Iglesia de Almendralejo entre 1986 y 1996. Le gustaba colaborar en los medios de comunicación y así fue como aportó su sapiencia en Radio Almendralejo, donde durante dos décadas dirigió el espacio semanal La Iglesia es noticia. Ha colaborado en los principales medios impresos de la región, incluido El Periódico de Extremadura, publicando tres libros donde se recogen muchos de estos escritos: Canto a la vida (2012), Mosaico de la vida (2013) y Las columnas de la verdad (2015).

También ha sido pregonero de las fiestas de la Piedad, de la Semana Santa local y de la romería de San Marcos, siendo cofundador de la asociación histórica de Almendralejo. Se ha ido un hombre que dio mucho tiempo de su vida por esta ciudad, que le dio este año su medalla de plata.