Dos hombres encapuchados atracaron ayer una sucursal bancaria a punta de pistola y con un arma blanca en la carretera de Santa Marta de Almendralejo sustrayendo los bolsos de dos clientas y una parte pequeña del dinero que había en la caja.

Los hechos ocurrían minutos antes de las nueve de la mañana en la oficina de Caja Rural de Extremadura de dicha calle. Dos hombres entraron en ella con las cabezas cubiertas con bufandas, pasamontañas y gorras y portando uno de ellos una pistola y el otro un cuchillo de grandes dimensiones.

En ese momento se encontraban en el banco los trabajadores y dos clientas. Los atracadores entraron dirigiéndose al director de la sucursal por su nombre y diciéndole que le conocían. Mientras uno se quedaba en la zona común, el otro cogió a los clientes y se los llevó al despacho del director empujándoles y apuntándoles con la pistola a la vez que les gritaba que no le mirasen a los ojos. A una de ellas les quitó el bolso y a la otra clienta el monedero.

Según una de ellas, también se llevaron una cantidad pequeña de dinero de la caja. Esta misma víctima admitió ayer a este diario que los dos tenían acento extremeño y parecían ser jóvenes. Cuando consiguieron los bolsos y el dinero de la caja, los dos atracadores emprendieron la huida en un vehículo que estaba parado en la puerta y que según testigos que se encontraban en la calle era de color rojo. Pero antes de salir del banco se les cayó el cuchillo al suelo y el monedero en la calle.

El director de la sucursal salió del banco cuando se fueron y se dirigió a un establecimiento comercial de la zona para que avisaran a la policía. De forma inmediata se trasladaron patrullas de la policía nacional y la local.

La Delegación del Gobierno en Extremadura explicó ayer que la investigación de este atraco sigue abierta. No es el primero del año en la ciudad. El 6 de enero, también dos encapuchados atracaron una gasolinera en la carretera de Aceuchal y en diciembre un chalet en la zona de San Marcos. En estos dos últimos además, se llevaron los vehículos de las víctimas.