Empresarios y emprendedores han presentado en el Ayuntamiento de Almendralejo varios proyectos para la implantación de empresas de biomasa en la ciudad y en la zona, según informó ayer el concejal José Antonio Regaña, quien reconoció que hay "mucha gente" interesada en instalar este tipo de empresas para producir energía eléctrica a través de la biomasa.

El edil comentó que existen proyectos "encima de la mesa" que se han presentado tanto en el consistorio como en la Junta de Extremadura. Aunque no quiso detallar muchos de ellos, sí explicó que los hay "de todo tipo". Proyectos a un alto nivel de producción de energía a gran escala, que necesitan el visto bueno del gobierno extremeño, y otros a un nivel más bajo, como empresas de instalación de calderas o de producción más baja de energía.

Actualmente en Almendralejo no existen empresas que dedique su actividad a trabajar con la biomasa. Sí las hay en otras localidades de la región, como la central eléctrica de Acciona en Miajadas o las dos plantas de biodiesel. En el caso de que estos proyectos sigan adelante y se conviertan en negocios, para el concejal, "serán más empresas que estén en Almendralejo, que darán trabajo y que trabajan con energías renovables". Según Regaña, este interés viene dado por los recursos de la zona que "afortunadamente" se pueden aprovechar y por las oportunidades que se ofrece. Asimismo, comentó que las oportunidades de aprovechamiento son muy amplias, y puso como ejemplo los restos de poda de los cultivos, pero reconoció que hay que abrir campos y no limitarse a los cultivos tradicionales de la comarca.

CURSO DE BIOMASA Estas declaraciones las hizo ayer en la presentación de un curso sobre biomasa que se impartirá del 11 de noviembre al 3 de diciembre en el centro universitario Santa Ana, organizado también por el Centro de Investigación Agraria Finca La Orden-Valdesequera. Es la primera vez que se desarrolla un curso de este tipo en la ciudad y el objetivo que persigue es formar a los futuros técnicos y a los que ya están trabajando en ello. Según uno de los investigadores de la Orden, Jerónimo González, para ellos es importante transferir fuera todos los conocimientos de los que disponen para que se pueda aplicar en el sector agrario y en las cooperativas de la región. Aseguró que el consumo de energía renovable está aumentando y se va a incrementar en los próximos años en la Unión Europea, ya que la idea es que la quinta parte de la energía proceda de las renovables, entre las que se encuentra la biomasa.

Por ello, han enfocado este curso de forma práctica con el fin de ver las aplicaciones reales del entorno y siempre persiguiendo los objetivos de las energías renovables: reducir las emisiones de gases y garantizar el suministro eléctrico. Para el cumplimiento de estos objetivos el sector agrícola tendrá un papel importante, a juicio de González, ya que los agricultores podrán generar energía de una forma sostenible y a la vez ingresos para ellos.

USO DOMESTICO En este sentido, el investigador enfoca el uso de la biomasa desde un punto de vista industrial, debido a la importancia del sector agroalimentario en la zona, pero la profesora de Santa Ana, María del Carmen Vidal, también destacó el uso doméstico. Explicó que en la comarca existen muchas casas de campo, chalets o cortijo donde el gas no llega todavía y a la hora de colocar la instalación de calefacción una buena opción puede ser las calderas de tala,que son más limpias, económicas y funcionan bien. Vidal también quiso agradecer el patrocinio de Cajalmendralejo y a La Orden por haber elegido el centro universitario almendralejense para impartir este curso, ya que Santa Ana llevaba mucho tiempo intentando poder desarrollarlo.

Este curso de biomasa tendrá una duración de 45 horas y se impartirá los viernes por la tarde y los sábados por la mañana. En él se definirá el concepto de biomasa; se hará un análisis de una caldera de biomasa comparándolas con otras; se verá cuáles son los residuos que se pueden aprovechar y los cultivos energéticos; se visitará instalaciones como bodegas, balnearios o piscinas climatizadas; se calcularán equipos; se realizará estudios económicos de cambios de calderas y se verán las ayudas existentes para la adquisición de equipos. González destacó que se verán todas las aplicaciones posibles y reales, ya que el fin es que los técnicos vean de qué forma pueden instalarse en la zona.

En un principio el curso estaría dirigido a los técnicos de las empresas de la región, pero también se ha abierto a los alumnos, sobre todo a los del Grado Superior de Industrias Agrarias y Alimentarias. En este sentido, Santa Ana cree que se trata de una información importante para el futuro del sector agrario y agrícola, ya que la biomasa es una "alternativa más que se puede usar con las energías que se utilizan ahora". Para Vidal el curso es "enormemente práctico y tremendamente útil" para los futuros técnicos y para los que trabajan en cooperativas, empresas y sus propias explotaciones y bienes. Además, consideró que existe un amplio abanico en el trabajo de la producción de energía con la biomasa y resaltó el uso que se le da a los restos de la limpieza de bosques en otras zonas y también países.