La empresa almendralejense Toldos Vázquez ha recurrido a la Audiencia Provincial la sentencia que le obliga a indemnizar con 22.000 euros a las personas afectadas por la caída de una cornisa en el centro de la ciudad.
La pasada semana un juzgado de Almendralejo dictó sentencia por la cual obligaba a la empresa a sufragar los daños ocasionados, al considerar que la responsabilidad de lo que ocurrió fue la elección inapropiada del lugar de anclaje de los toldos. Eurdesa --contratada a su vez por la Asociación de Comerciantes del Centro (Asemce) para poner en marcha el centro comercial abierto-- contrató a Toldos Vázquez para instalar las cubiertas. En septiembre del 2007, la cornisa donde estaban enganchados los toldos se derrumbó provocando daños materiales y cuatro heridos leves.
SEGUROS Según explicó uno de los responsables de Toldos Vázquez, Pedro Vázquez, la sentencia se recurrirá a través de su compañía de seguros, ya que considera que el derrumbe "fue a causa de la climatología", debido a que hacía mucho viento.
Vázquez comentó que la elección del procedimiento para enganchar los toldos la tomaron los técnicos del ayuntamiento y ellos sugirieron que no era la forma más adecuada, por lo que propusieron engancharlos en unas estructuras ancladas en el suelo. "La premura del tiempo en desarrollar el proyecto del centro comercial abierto es lo que llevó a que la instalación se realizara como se había sugerido desde el consistorio", señaló.
Vázquez recalcó que ellos adoptaron las medidas oportunas "para cualquier problema que pudiera surgir", como contratar un seguro de responsabilidad civil. "Además, Asemce, Eurdesa y el ayuntamiento eran conocedores de que esa no era la instalación adecuada", añadió. La empresa recibió el dinero que le correspondía "por el trabajo desarrollado" y Vázquez aseguró que los toldos están almacenados actualmente en las instalaciones de su empresa.
