Ya se ha instalado un nuevo controlador de vertidos permanente junto al arroyo Las Picadas, en la calle Luis Montero Bejar. El ayuntamiento está colocando estos vertidos por distintas zonas de la ciudad, para prevenir que no se produzcan vertidos ilegales de determinadas empresas a los colectores de aguas residuales urbanas. La intención es hacer una medición continúa para que cualquier vertido ilegal se detecte de forma inmediata.