Dos meses y medio después de ponerse en marcha, un 40% de los participantes del proyecto de la lanzadera de empleo local han encontrado trabajo. En concreto, 10 jóvenes de los 25 que integraron este programa impulsado por la Junta de Extremadura y la Fundación Santa María la Real, y en el que colaboran el Fondo Social Europeo, Sexpe, Fundación Telefónica y ayuntamiento de Almendralejo.

Estos jóvenes se reúnen por las mañanas de lunes a jueves en el vivero de empresas anexo al Centro de Innovación con el objetivo de trabajar de un modo conjunto y solidario en la búsqueda de empleo.

Una de las que se ha beneficiado del plan ha sido Inés Ponce, que acaba de encontrar trabajo como agente Igualdad y Oportunidades en el consistorio. Es licenciada en Sociología y considera que el grupo trabaja un aspecto esencial como es la motivación: "Somos personas jóvenes, preparadas y con ganas de trabajar, pero te cansas de llamar a todas las puertas y que no se te abra ninguna. Eso te hace entrar en un círculo de desmotivación que es lo que contrarrestamos aquí. Trabajamos mucho la positividad y afrontar con optimismo el proceso de búsqueda de empleo", argumenta.

Parecido piensa Borja Calero, un joven que acaba de tener una entrevista de trabajo y espera la llamada de una empresa. "He aprendido a afrontar este tipo de selecciones con más motivación. Los compañeros me han dado la moral y tranquilidad necesaria para afrontar una entrevista con garantías y me he notado mejor que mis rivales", señala. Borja es más explícito aún: "Cuando sales de la carrera, lo único que sabes es estudiar. Nadie te dice cómo encontrar trabajo. Aquí, aunque somos perfiles distintos, todos estamos en la misma situación de desempleo y el objetivo es ayudarnos para salir de aquí".

Para Guadalupe Pardo, otra de las participantes, la lanzadera le ha servido como "terapia de grupo". Ella es Ingeniera Técnica de Obras Públicas y aunque sabe que su futuro está lejos de España, " el contacto con compañeros y la experiencia aquí seguro que puede servirme".