Varios padres de la Ampa del Antonio Machado luchan desde hace años para garantizar que sus hijos vayan seguros al colegio, sobre todo sin obstáculos relacionados con el tráfico que pongan en peligro su integridad física.

De hecho, uno de esos problemas existe desde marzo del pasado año cuando empezó a ponerse una valla de seguridad que corta la calle San Blas a la altura de Vicente Aleixandre para que los niños caminen sin coches hasta el colegio. Pero ocurre que muchos padres la retiran, tanto a las nueve de la mañana como a las dos de la tarde, para llevar a sus hijos en sus vehículos casi hasta la puerta del colegio y recogerlos, lo cual provoca que esa calle, que es estrecha, acabe llena de turismos y con poco espacio para el paso de escolares.

Como solución, la ampa se ha puesto en contacto con el hogar de mayores y, gracias a un programa de la Dirección General de Tráfico, sus socios están siendo formados por agentes de la policía local para que ejerzan de guardias en las zonas en las que se cortan las calles, tanto en la intersección de San Blas como Aleixandre y plaza de Donantes. Irán provistos de petos y elementos de seguridad.

Ayer recibieron la primera charla informativa, aunque la idea es que empiecen tras la Semana Santa, después de recibir luz verde de la delegación de Tráfico. De salir bien, podría ser replicada en otros centros escolares.