El centro de día que Cruz Roja gestionaba en la calle Alfonso X, justo al lado del parque San José, finalmente no cerrará sus puertas y seguirá atendiendo a personas mayores y dependientes y lo hará gracias a la oenegé Mensajeros de la Paz, que lleva más de 25 años asentada en Extremadura, que ha salido al rescate y se hará cargo de la gestión y funcionamiento del servicio tras llegar a un acuerdo con Cruz Roja y el Sepad. Este hecho permitirá que se siga atendiendo a los doce usuarios que acuden diariamente a estas instalaciones y se mantendrán cuatro puestos de trabajo tras el informe preceptivo realizado por Cruz Roja.

Consolación Serrano, directora gerente del Sepad, y Mercedes Murias, presidenta de Mensajeros de la Paz en Extremadura, anunciaron ayer el acuerdo durante su visita al centro. Cruz Roja había comunicado a usuarios y trabajadores que cesaba el servicio el 30 de junio, principalmente, por falta de financiación. A partir de ese momento, Mensajeros de la Paz mantuvo los contactos y negociaciones necesarias para evitar el cierre. «La Junta nos llamó y explicó el problema. El Sepad ha hecho de mediador y nosotros nos hemos entendido rápido con Cruz Roja. Además, cumplimos con uno de nuestros objetivos como es la atención a personas mayores y dependientes», explicó Mercedes Murias.

Según recordó Consolación Serrano, este centro de día tenía una subvención nominativa otorgada por la Junta de Extremadura para 2018 de 115.00 euros, y a esta cantidad había que sumar las aportaciones de los usuarios y otras vías de financiación. Sin embargo, a Cruz Roja no le cuadraba el presupuesto y decidió echarse a un lado. Así, el Sepad liquidará la ayuda con Cruz Roja hasta fecha de 30 de junio y hará el resto de la aportación correspondiente a Mensajeros de la Paz.

La directora gerente del Sepad informó también que está abierta otra posibilidad para lograr más ingresos y sería a través de la Orden de Subvención de Deterioro Cognitivo. El Sepad también confirmó que mantendrá esta ayuda nominativa para años venideros.

Actividad/ Este centro de día abre sus puertas de lunes a viernes, entre las nueve de la mañana y cinco de la tarde. Trabaja con usuarios dependientes y cubre necesidades básicas en alimentación con desayuno, comida a media mañana, almuerzo y merienda. Además, los trabajadores asistentes les estimulan haciendo ejercicios de fisioterapia y psicomotricidad, y les ayudan con su aseo y a vestirse, según las circunstancias de cada uno.

El centro atiende ahora a 12 personas, pero tiene una capacidad máxima de 25 usuarios. Mercedes Murias reconoció que ahora mismo habría más trabajadores de los que se necesitan, pero confía en que el centro vuelva a recuperar la normalidad y las familias puedan confiar en los servicios que presta después de 15 años de experiencia y vuelvan a solicitar sus servicios.