Miles de almendralejenses invadieron las calles del centro desde primera hora del pasado miércoles para festejar las horas previas a la Nochebuena con la familia y los amigos.

Así diversos colectivos y establecimientos comerciales ofrecieron a sus clientes, socios y al resto de la población un desayuno gratuito. Las migas, los dulces típicos de la tierra, el café, el chocolate, el anís y los licores de bellota no faltaron en las puertas de la sede de la Asociación de Amas de Casa Nuestra Señora de la Piedad o en la puerta de la Barbería Manolo, en la plaza de la Hierba. "Es una buena forma de empezar el día, desayunando migas y cantando villancicos, saludando a la gente que hace tiempo que no ves y a los que no faltan ningún año al desayuno", explicó la presidenta de las amas de casa, Toni Calvo. Esta asociación, el dueño del negocio citado y otros establecimientos comerciales llevan muchos años preparando más de 20 kilos de migas para los cientos de ciudadanos que se acercan a probarlas.

La siguiente hora especial , es a partir de las dos de la tarde, cuando las tiendas cierran y, como es ya tradicional, almendralejenses y llegados de fuera llenaron los bares para seguir celebrando esta festividad con los amigos y familiares hasta pasadas las cinco de la tarde, que se toman el café, la copa y unos regresan a casa y otros siguen animando las calles.

Por su parte, la policía local aumentó vigilancia y el servicio con dos agentes más para evitar que se celebrase el botellón en la calle Cometa, la avenida de la Paz y la cale Luna.

De hecho, los vecinos de la calle Cometa enviaron hace unos días un escrito al alcalde y a la policía pidiendo que se elevase la vigilancia estos días en dicha zona y evitar el botellón , ya que "se producen ruidos y mucha suciedad en la zona". Aún así, se evitaron algunos botellones , pero los jóvenes siguieron bebiendo en la calle hasta primera hora de la noche. En la madrugada, los bares volvieron a llenarse hasta primera hora de la mañana.

Además, el servicio de limpieza se ha reforzado con más operarios barriendo las vías públicas y con una máquina para limpiar toda la suciedad que dejaron.

Destacar también que esta aglomeración de gente provocó colapsos en el tráfico, sobre todo en el centro, por lo que los agentes regularon el tráfico en algunos momentos, sobre todo el miércoles. Pese a todo, no hubo ningún suceso grave, salvo algunas intoxicaciones etílicas.